Un dibujo de Picasso, perdido hace casi 100 años, reaparece en una subasta

Fuente: Télam ~ La obra del renombrado artista malagueño fue localizada en el Museo Metropolitano de Arte (MET) de la ciudad de Nueva York, Estados Unidos. Será subastada el 7 de octubre en la ciudad de Barcelona, España. 

Un dibujo original del pintor español Pablo Picasso (1881-1973) que había estado desaparecido por casi 100 años y fue localizado en el MET (Museo Metropolitano de Arte) de la ciudad de Nueva York, será subastado el 7 de octubre en Barcelona.

Se trata de uno de los dibujos preparatorios que el español realizó para su célebre obra «La comida del ciego», finalizada en 1903, que estaba actualmente exhibido en el Museo de Nueva York (Met). Es una de las escasas creaciones de la llamada etapa azul del artista, una de las más conocidas por el público.

La subasta, con precio de salida 40.000 euros que se estima que llegue a los 100.000 euros, estará a cargo de la casa barcelonesa Subarna.

«Cuando se trata de grandes nombres, por lo general y en un primer momento se suele desconfiar, ya que habitualmente se trata o de reproducciones o copias. Sin embargo, al verlo al natural, la primera impresión fue positiva, dada la seguridad del trazo y de la firma», dijo a la prensa el experto Juan Carlos Bejarano.

«Cuando se trata de grandes nombres, por lo general se suele desconfiar (…) Sin embargo, al verlo al natural, la primera impresión fue positiva, dada la seguridad del trazo y de la firma»Juan Carlos Bejarano

«Además, el soporte era una tarjeta postal, un material reutilizado y humilde, muy acorde con la pobreza en la que se hallaba sumergido por aquellos años Picasso: solo quedaba verificar si la obra aparecía reproducida en el famoso y enciclopédico catálogo razonado de Zervos, y así fue», agregó.

La firma que aparece en la reproducción de Zervos era falsa, lo que motivó a que más tarde, hacia finales de los años 1950 o principios de los 1960, el propio Picasso la firmara. Una prueba de que se trata del mismo dibujo es que aún se puede observar el desgastado trazo de aquella primera rúbrica, cerca de la más reciente y auténtica.

Según la casa de subastas, esta es la primera vez que la obra se muestra al público en color y con la firma autógrafa del artista malagueño.

Hay estudios que revelaron que se trata de una obra vinculada con la ciudad de Barcelona, que fue realizada en agosto de 1903 en Tiana (Barcelona), donde Picasso se alojaba en la casa de la familia Reventós.

Revelan los secretos de una obra «melliza» de «La Mona Lisa»

Fuente: Ámbito ~ Una muestra revela secretos de la Gioconda del Prado, melliza de la famosa obra que exhibe el Louvre.

El Museo Nacional del Prado, en Madrid, presenta a partir de mañana la primera exposición monográfica dedicada a «La Gioconda del Prado», obra melliza a la del Louvre, descubierta hace diez años, que fue pintada en el mismo taller y en la misma época en que Leonardo da Vinci se dedicaba a retratar a la mujer de extraña sonrisa, un caballete junto al otro.

«Leonardo y la copia de Mona Lisa. Nuevos planteamientos sobre la práctica del taller vinciano» se titula la exposición que reúne un selecto conjunto de obras pintadas por discípulos y seguidores de Leonardo da Vinci, con la intención de ahondar en las copias y versiones hechas en aquella «bottega», que el público podrá visitar en el museo español hasta el 23 de enero, en la sala D del edificio Jerónimos.

Curada por Ana González Mozo, y realizada en colaboración con el Museo del Louvre, el Laboratorio de Arqueología Molecular de la Universidad de la Sorbona y la National Gallery de Londres -entre otras instituciones-, la muestra revela al público los resultados de los últimos estudios dedicados al círculo más cercano al artista. Al mismo tiempo, busca reflexionar sobre los métodos de enseñanza y de producción de pinturas en el marco de los talleres italianos durante la transición del siglo XV al XVI.

El Museo del Prado tiene la copia más antigua conocida de la Mona Lisa, o Gioconda, el retrato de una mujer joven que Leonardo da Vinci comenzó a pintar en 1503 y continuó reelaborando hasta su muerte en 1519.

«Sabemos que fue pintado por un alumno de Leonardo, trabajando junto al maestro en el estudio durante parte del tiempo que estuvo pintando el original», explicaron desde el museo madrileño, sobre la obra melliza de la que poco se conocía hasta el año 2011.

En la Mona Lisa del Prado, la figura estaba sobre un fondo negro que no ofrecía muchas pistas. Sin embargo, durante el estudio realizado antes de su limpieza se descubrió que se trataba de un repintado añadido siglos después que ocultaba un maravilloso paisaje similar al original de Leonardo.

Además, el reflectograma infrarrojo mostró que los cambios en la obra del Prado siguieron las modificaciones que Leonardo hizo en su pintura con el objetivo de alcanzar la perfección, lo que permite asegurar que el cuadro «convivió en Milán con el gran genio y su obra maestra», indicaron desde la institución.

La nueva propuesta curatorial profundiza también sobre la figura poco convencional de Leonardo como maestro y otros temas del Renacimiento: la importancia de la idea, el concepto de original, la función y los tipos de copias y derivados de los prototipos creados por los grandes maestros. En algunos casos, fueron ejecutadas siguiendo instrucciones del maestro, por lo que Leonardo que podía ver así cómo funcionaban sus ideas cuando eran ejecutadas por otros.

Las pinturas expuestas, que tienen su origen en dibujos y pinturas del artista, ayudan a comprender cómo el bagaje teórico de Leonardo fue asimilado por sus discípulos y contribuyen a dar sentido a muchas de las ideas y observaciones reflejadas en sus notas.

El mayor interés de este retrato paralelo -además de ser la copia más temprana de la Mona Lisa conocida hasta el momento- es que fueron realizadas al mismo tiempo: desde el dibujo preparatorio y hasta casi los últimos estadios se repite el proceso creativo del original. Las dimensiones de ambas figuras son idénticas y fueron quizá calcadas partiendo del mismo cartón.

Durante muchos años, los expertos del museo madrileño creyeron que la obra que guardaban en su depósito había sido pintada por algún artista flamenco u holandés y era considerada como una más de las muchas versiones existentes del célebre cuadro homónimo, aunque en este caso se destaca la ausencia del característico ‘sfumato’ leonardesco.

Sin embargo, la Mona Lisa del Prado, realizada en óleo sobre tabla de madera de nogal, es de un autor anónimo, aun no identificado, aunque fue realizada por un miembro del taller de Leonardo, próximo a Salai o a Francesco Melzi, los alumnos más cercanos al maestro y que tenían acceso directo a sus dibujos de paisaje.

“Arte antitalibán”: una guerrilla de artistas afganos resiste al régimen en Kabul

Fuente: Clarín ~ “Te beso en medio de los talibanes, no tengas miedo”, escriben los jóvenes en las paredes de la ciudad y también se expresan en las redes sociales. Dicen que no luchan con armas sino con su trabajo.

Dos días después de la entrada de los talibanes a Kabul en agosto, Sara tomó los platos de terracota que había pintado con imágenes de inspiradoras mujeres afganas y los lanzó contra el suelo. «El arte era mi vida», explica desde la capital afgana esta artista de 26 años que pidió no usar su verdadero nombre. «Ya no tengo futuro», lamenta la joven mujer, aterrorizada por el retorno de los islamistas radicales al poder.

Durante su régimen anterior (1996-2001), las mujeres fueron expulsadas de la vida pública, pero también los talibanes prohibieron la música y destruyeron piezas de arte y patrimonio cultural, como los antiguos budas gigante de Bamiyán.

Asustados por los nuevos dirigentes, artistas como Sara han destruido sus trabajos, y músicos han roto sus instrumentos.

«El arte, para mi, era poder expresar todo aquello que no podía decir con palabras», especialmente lo relacionado «con la violencia contra las mujeres», afirma.

El artista afgano y cofundador del colectivo ArtLords, Farshad (seudónimo), posa junto a uno de los trabajos de su grupo, en París el 11 de septiembre de 2021 / Foto: AFP
El artista afgano y cofundador del colectivo ArtLords, Farshad (seudónimo), posa junto a uno de los trabajos de su grupo, en París el 11 de septiembre de 2021 / Foto: AFP

Kabul ha cambiado dramáticamente desde el último régimen talibán. Sara forma parte de una nueva generación avezada a las redes sociales, que creció en una capital donde empezaban a florecer el arte y la cultura.

Ahora la joven quiere usar este arte para protestar contra los talibanes. Su esperanza es trabajar con una guerrilla de grafiteros para extender su mensaje: «Quiero salir por la noche y pintar arte antitalibán», dice.

Maryam, también artista de 19 años, cuyo nombre fue modificado para este texto, quiere publicar creaciones digitales antitalibanes en Instagram. Un ejemplo: una chica desabrocha la parte superior de un burka del que escapan unas palomas.

Agentes de policía de Kabul retiran los restos de un automóvil dañado a raíz de la explosión de una bomba en Kabul, Afganistán/ Foto: EFE
Agentes de policía de Kabul retiran los restos de un automóvil dañado a raíz de la explosión de una bomba en Kabul, Afganistán/ Foto: EFE

«El arte está muriendo en Afganistán», afirma. Pero «voy a luchar contra los talibanes, no con armas, sino con mi trabajo».

Ramin Mazhar era todavía niño cuando los talibanes mandaron por última vez en Kabul. Dos décadas después, y residiendo en Francia, es uno de los poetas más reconocidos de su país.

«No tienes miedo del amor, de la esperanza, del mañana», recita en persa darí, unos versos que se han convertido en himno para la juventud afgana. «Te beso en medio de los talibanes, tú no tienes miedo».

Sus poemas, convertidos en canciones, tuvieron cientos de miles de visualizaciones en YouTube. Pero cuando Mazhar trató de buscarlos recientemente, vio que habían sido borrados.

La gente destruye su obra y borra sus publicaciones en un «suicidio» artístico, explica el poeta. «Muchos se vieron forzados a autocensurarse para proteger sus vidas. Esto convierte el futuro del arte en Afganistán en negro e incierto. No sabemos adónde nos dirigimos», alerta.

Pero él no quiere abandonar. «El arte existe donde sea que el hombre exista (…) A lo mejor el arte continuará secretamente, clandestinamente o ilegalmente», asegura.

En París, la artista Rada Akbar planifica una exhibición de pinturas en miniatura para ilustrar que «los talibanes no son el Afganistán real, y que no representan la historia y la cultura del país».

La actriz Yasamin Yarmal huyó a Francia el mes pasado con su familia, como decenas de sus pares.

La actriz Yasamin Yarmal en una sesión de fotografía el 8 de septiembre de 2021 en París, donde está exiliada tras huir de los talibanes en Afganistán. /  Foto: AFP
La actriz Yasamin Yarmal en una sesión de fotografía el 8 de septiembre de 2021 en París, donde está exiliada tras huir de los talibanes en Afganistán. / Foto: AFP

En 1997, los talibanes registraron su casa y golpearon hasta la muerte a su hijo discapacitado, asegura. «No quería pasar por eso otra vez», afirma.» El arte puede abrir la mente de la gente. Por eso los talibanes tienen miedo de los artistas», continúa. Muchos de los que quedaron en Afganistán están encerrados en casa, temerosos de salir y preocupados, sin futuro.

«El arte puede abrir la mente de la gente. Por eso los talibanes tienen miedo de los artistas», dice Yasamin Yarmal, que se exilió en Francia junto  su familia.

Sodaba, una actriz, asegura que recibe llamadas telefónicas amenazantes y que vive en «una pesadilla».

«Tenemos un grupo de WhatsApp con otros artistas», cuenta. «La gente dice que los talibanes crearon una lista de personas a encontrar, y tengo miedo de estar en ella».

Farshad, cofundador del colectivo ArtLords, que previamente cubría las paredes de Kabul con cientos de murales promoviendo la paz y los derechos de las mujeres, conserva la fe.

A diferencia de lo ocurrido en el régimen anterior, los afganos pueden acceder a arte, música y películas por internet.

El poeta Ramin Mazhar posa en una sesión de fotos en París, el 9 de septiembre de 2021./ Foto: AFP
El poeta Ramin Mazhar posa en una sesión de fotos en París, el 9 de septiembre de 2021./ Foto: AFP

«El mundo está a un clic de ellos», afirma. «Será muy difícil para los talibanes imponer o sancionar el arte», argumenta.

Los murales de su colectivo han sido tapados con eslóganes de propaganda en el esfuerzo talibán para reimponer su visión austera de la sociedad.

Farshad ahora vive en París, pero pide hablar bajo seudónimo porque quiere volver a Kabul para ayudar a huir a otros artistas.

«No creo que el arte muera en Afganistán (…) Estoy seguro que un día el movimiento talibán morirá, pero el arte seguirá allí», augura.

Para no pagar impuestos la hija de Picasso dona nueve obras al museo dedicado a su padre en París

Fuente: Ámbito ~ Las nueve obras que desde ahora forman parte del patrimonio francés contribuyen a mantener al Museo Picasso de París como el mayor depositario de la obra del pintor malagueño, con más de 5.000 piezas

Nueve obras del pintor español Pablo Picasso (1881-1973), entre las que destacan un retrato de su padre realizado en 1895 y una pintura en blanco y negro creada después de su emblemáticó «Guernica», fueron donadas hoy a Francia por su hija Maya, lo que significa la tercera donación de cuadros de parte de la heredera desde la creación del Museo Picasso en París.

Las nueve obras que desde ahora forman parte del patrimonio francés contribuyen a mantener al Museo Picasso de París como el mayor depositario de la obra del pintor malagueño, con más de 5.000 piezas, de las cuales 300 son pinturas, y 200.000 documentos y objetos.

La ministra de Cultura de Francia, Roselyne Bachelot, definió a la donación como «excepcional» y destacó que se trata de la primera desde 1990, según indicó la agencia de noticias AFP que informó que «la donación sirve para que los herederos de la familia Picasso eviten importantes cargas fiscales por temas de sucesión».

En una ceremonia que incluyó la presencia de autoridades nacionales, Diana y Olivier, los hijos de Maya Ruiz Picasso (86 años), hija de Picasso y de Marie-Thérèse Walter, leyeron una carta de su madre en la que destacaba que «Francia fue la elección de mi padre, y yo nunca he pensado en irme a otro lugar».

La donación incluye la obra «Don José Ruiz», un cuadro que data de 1895 y donde el joven Picasso pintó a su papá de perfil con una delicada paleta de marrones; la obra mixta de óleo y carbonilla, «Estudio para una intérprete de mandolina» de 1932; y el «Retrato de Émilie Marguerite Walter (Mémé)» de 1939, en la que el artista pintó a su suegra, la abuela de Maya y madre sueca de Marie-Thérèse.

Pero entre las obras más destacadas de esta serie figura «Niño con piruleta sentado debajo de una silla» de 1938. Se trata de un retrato en blanco y negro, cubista, que recuerda plenamente a los personajes acorralados del «Guernica», que había impactado un año antes.

El lote de nueve obras se compone, también, de dos curiosidades: por un lado, la escultura «La Venus del Gas», de 1945, en la que el artista tomó un quemador de gas, lo enderezó, le puso un pedestal de madera y transformó el objeto en una diosa, y por el otro, el óleo titulado «El Bobo» (1959), donde Picasso se apropió de la figura del enano de corte, característico de la obra de Diego Velázquez, con un personaje que ríe con botella y sartén en mano.

Picasso también estaba enormemente interesado por la pintura de el país que lo recibió y por ese motivo, su hija Maya, decidió donar un cuaderno de dibujos sobre el cuadro «Almuerzo sobre la Hierba» del francés Edouard Manet (1863).

La donación de obras con autoría de Picasso se completa con «Cabeza de hombre», de 1971, mientras que la novena pieza entregada a Francia no es una obra del artista sino una obra prehistórica que lo acompañó toda su vida desde que la compró en la primera década del siglo XX: una estatuilla Tiki de las Islas Marquesas.

Arte sobre césped en Nueva York: así es la megaobra del artista callejero Saype en la sede de la ONU

Fuente: La Nación ~ La pintura, efímera y biodegradable, se puede ver a partir de hoy en la entrada del edificio en Manhattan.

Una nueva megaobra de landart se luce desde hoy en la sede de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en Manhattan, Nueva York, y durará lo que las condiciones climáticas de la ciudad permitan que dure. Su autor, Guillaume Legros, alias Saype, es un joven grafitero francés de 32 años que crea obras de arte hiper-realistas sobre césped o tierra. Para ello, utiliza una pintura ecológica que el mismo inventó, compuesta principalmente por tiza y carbón, que no afecta al ambiente y es biodegradable.

Su ingenio y creatividad, en consonancia con sus mensajes en pos del ambiente, la paz internacional y los derechos de las niñas y los niños, posicionaron a Saype como el pionero de un movimiento artístico contemporáneo que fusiona arte y paisajes.

La obra de arte cubre 11.000 metros cuadrados y fue realizada con pinturas biodegradables hechas de pigmentos naturales como carbón y tiza. Es el segundo paso de un proyecto iniciado en la sede europea de la ONU en Ginebra en 2020.
La obra de arte cubre 11.000 metros cuadrados y fue realizada con pinturas biodegradables hechas de pigmentos naturales como carbón y tiza. Es el segundo paso de un proyecto iniciado en la sede europea de la ONU en Ginebra en 2020.Gentileza (Valentin Flauraud para Saype).

La obra, que se inauguró esta mañana en Estados Unidos, se llama World in Progress II y es la segunda etapa de la intervención que realizó el artista en 2020 en la sede de la ONU en Ginebra, para celebrar el 75 aniversario de la creación de este organismo internacional.

La infancia, el medio ambiente y la paz mundial son los mensajes constantes que transmite Saype en sus obras.
La infancia, el medio ambiente y la paz mundial son los mensajes constantes que transmite Saype en sus obras.Gentileza. – Valentin Flauraud para Saype.
La obra es un regalo de Suiza a la ONU para celebrar el 75 aniversario de la organización y el lanzamiento de la Agenda Común.
La obra es un regalo de Suiza a la ONU para celebrar el 75 aniversario de la organización y el lanzamiento de la Agenda Común.Gentileza. – Valentin Flauraud para Saype

Este año, y con el fin de conmemorar el lanzamiento de la Agenda Común de la ONU, Saype quiso recordarle a las generaciones presentes su deber con respecto a las generaciones venideras. Transmitirles con su arte que no deben perder de vista el ideal de paz entre naciones. Naciones que, según el artista, tendrán que ir de la mano para preservar el patrimonio ambiental mundial.

Saype preparando la obra gigantesca titulada "World in Progress II" en Nueva York el viernes 10 de septiembre de 2021.
Saype preparando la obra gigantesca titulada «World in Progress II» en Nueva York el viernes 10 de septiembre de 2021.Gentileza. – Valentin Flauraud for Saype
El artista recostado al lado de su obra después de terminar el trabajo
El artista recostado al lado de su obra después de terminar el trabajoGentileza. – Valentin Flauraud para Saype

Desde 2013 Saype recorre el mundo para pintar en parques, montañas o ciudades. En 2019, gracias a su enfoque y técnica innovadora, la famosa revista Forbes lo incluyó en su lista de las 30 personalidades europeas sub-30 más influyentes del arte y la cultura. Ese mismo año, el artista visitó la ciudad de Buenos Aires y plasmó una de sus obras sobre el pasto de la Plaza San Martín, en Retiro, por el Día del Reciclaje.

  • Para ver algunas de sus obras más conocidas podés visitar su sitio, www.saype-artiste.com
La figura humana del artista Saype dentro de una nube dibujada sobre el césped ayuda a tener una perspectiva de las enormes dimensiones de la obra.
La figura humana del artista Saype dentro de una nube dibujada sobre el césped ayuda a tener una perspectiva de las enormes dimensiones de la obra.Gentileza. – Valentin Flauraud para Saype.

Inauguraron el Arco de Triunfo empaquetado por el artista Christo con un costo de U$S 16 millones

Fuente: Télam ~ Se trata de la obra póstuma del artista de origen búlgaro que falleció en 2020 y fue realizada por el sobrino del artista, Vladimir Yavachev.

Elempaquetado del Arco de Triunfo parisino, obra póstuma del artista estadounidense de origen búlgaro Christo, con un costo de aproximadamente 16 millones de dólares, es «un regalo para los parisinos y para los franceses», declaró este jueves la ministra de Cultura, Roselyne Bachelot, en la presentación de la obra.

«Es un formidable regalo para los parisinos, para los franceses y más allá, para todos los amantes del arte».

ROSELYNE BACHELOT, MINISTRA DE CULTURA

El «paquete», formalmente inaugurado por el presidente Emmanuel Macron, consiste en 25.000 m2 de tela de polipropileno reciclable, que luce con tonos azulados al sol, sujetada al monumento con 3 km de cuerdas de color rojo.

El público podrá visitarlo a partir de este sábado y para eso la gran plaza que rodea el monumento, uno de los puntos cardinales de la ciudad, será cerrada al tránsito los fines de semana hasta el 3 de octubre, cuando será desmantelado.

Según la ministra de Cultura, Roselyne Bachelot, la obra es "un regalo para los parisinos y para los franceses".Según la ministra de Cultura, Roselyne Bachelot, la obra es «un regalo para los parisinos y para los franceses».

«Es un formidable regalo para los parisinos, para los franceses y más allá, para todos los amantes del arte», explicó Bachelot, citada por la agencia AFP.

Se trata de la obra póstuma de Christo (1935-2020) y de su pareja Jeanne-Claude (1935-2009), y fue realizada por el sobrino del artista, Vladimir Yavachev.

«Christo siempre decía que la parte más difícil era lograr los permisos», recordó Yavachev en la rueda de prensa. Sin embargo, en esta ocasión la autorización llegó de forma inusualmente rápida, desde la concepción del proyecto en 2017, precisó el ejecutor de «Arco de Triunfo, empaquetado».

El empaquetado costó 14 millones de euros (unos 16 millones de dólares), totalmente sufragados por la venta de dibujos y maquetas de la fundación Christo.El empaquetado costó 14 millones de euros (unos 16 millones de dólares), totalmente sufragados por la venta de dibujos y maquetas de la fundación Christo.

La alcaldesa de París, Anne Hidalgo, explicó que la experiencia previa de la ciudad con Christo, con el empaquetamiento del venerable Pont Neuf (Puente Nuevo) en 1985, fue decisiva para autorizar esta nueva aventura artística.

El proyecto de Pont Neuf «fue una manera de despertar esta ciudad», explicó Hidalgo.

El Arco de Triunfo, que empezó a ser construido en 1806, bajo Napoleón, recoge en sus fachadas y columnas las victorias del entonces emperador, y bajo las columnas yace la tumba del soldado desconocido, con una llama que es encendida cada noche.

El público podrá acercarse y tocar la obra, y la llama seguirá siendo encendida cada noche, precisó Hidalgo.

Se trata de la obra póstuma del artista búlrgaro y su mujer. Se trata de la obra póstuma del artista búlrgaro y su mujer.

El empaquetado costó 14 millones de euros (unos 16 millones de dólares), totalmente sufragados por la venta de dibujos y maquetas de la fundación Christo, aseguró Yavachev.

Christo llegó a principios de los años 1960 a París. En la capital francesa conoció a Jeanne-Claude, y desde su buhardilla podía contemplar cada día el Arco de Triunfo, recordó su sobrino.

Galardón internacional para un artista argentino por su aporte al grabado contemporáneo

Fuente: Infobae ~ Este reconocimiento a Leonardo Gotleyb, único artista argentino galardonado en esta edición del concurso, coloca a nuestro país entre los principales productores de Arte Gráfico del mundo.

Gotleyb fue galardonado con el Honorable Premio Especial por su desarrollo y aporte al grabado contemporáneo del mundo en la décima Trienal Internacional de Grabado Bitola 2021, que se desarrolló en la ciudad de Bitola, en Macedonia del Norte.Leonardo Gotleyb en su tallerLeonardo Gotleyb en su taller

Con anterioridad, este galardón fue otorgado a personalidades de la gráfica mundial, tales como Lukasz Bogdan, de Polonia, Victor Manuel Hernández Castillo, de México, Basil Frank, de Israel, Martín García Rivera, de Puerto Rico, Wieslaw Haladaj, de Polonia, Guy Langevin, de Canadá y Leon Zakrajsek, de Croacia, entre otros artistas de renombre.

“La Trienal Internacional de Arte Gráfico de Bitola considera que el licenciado Leonardo Gotleyb es uno de los autores más importantes del arte gráfico del mundo -dijo Vlado Goreski, director de la Trienal de Arte Gráfico-. Es un autor original con marcados mensajes ecológicos, un perfeccionista en su técnica con una poética profunda y una creatividad e inventiva excepcionales”.Leonardo Gotleyb, "Cartografía IV", xilografía 46x62, 2018. Obra presentada en la 10ª Trienal Internacional de BitolaLeonardo Gotleyb, «Cartografía IV», xilografía 46×62, 2018. Obra presentada en la 10ª Trienal Internacional de Bitola

Por otra parte, el crítico de arte y ex secretario de Cultura del Paraguay, Ticio Escobar, se refirió a su obra en los siguientes términos: “Buscando el secreto del paisaje urbano, Leonardo Gotleyb rastrea por debajo de sus construcciones el pulso íntimo, el lugar ausente, el detrás absoluto de la fachada y del andamio. Encuentra un entramado oscuro y descarnado y un armazón sostenido en el vacío. Descubre el reflejo invertido de las nervaduras esenciales, los resortes, tal vez de tanto empeño cartesiano. Allí, en el fondo, el artista ni juzga el sueño ilustrado ni queda demasiado seducido por la utopía de un racionalismo que reticula, secciona y rearma las geometrías de las ciudades. Se limita a presentar, serena, implacable, la radiografía o la foto quemada de miles de sueños y amenazas enmarañadas. A describir, con anticipada nostalgia arqueológica, el límite de cada proyecto humano que incuba siempre una ruina en sus entrañas…”"Acorazado", 2017. Xilografía de 80 por 60 cm«Acorazado», 2017. Xilografía de 80 por 60 cm

Leonardo Gotleyb nació en 1958 en Resistencia, Chaco, y vive y trabaja en Buenos Aires. Es Licenciado en Artes Visuales, egresado de “UNA”, Universidad Nacional de las Artes. Dicta cursos y conferencias en Universidades Argentinas y del Extranjero, y es profesor del Instituto Universitario Nacional de las Artes.

Desde 1987, Gotleyb ha sido seleccionado en más de 100 Bienales en América, Europa y Asia, obteniendo 18 Premios Internacionales en Corea, Japón, Egipto, México, España, Italia, Polonia, Rusia, Macedonia y Eslovenia.

El paisaje urbano, sus entrañas o sus ruinas, son el eje de la obra del multifacético Gotleyb, grabador, expositor, jurado, docente y curador y asesor artístico del gobierno de su provincia."Perfil urbano I" 100 x 100 cm«Perfil urbano I» 100 x 100 cm

Entre los galardones que ha recibido a lo largo de su ya extensa trayectoria, se encuentran: el 2018, Special Award, por su notable contribución al arte gráfico en el mundo, en la anterior edición de la Trienal Internacional de Grabado, Bitola, República de Macedonia; 2011, “Civilización y Barbarie”, exposición individual, invitado por la Trienal Internacional Gráfica de Krakovia, Polonia; 2009, “Maestros del Grabado Latinoamericano Contemporáneo”, dentro de la VI Bienal Internacional del Grabado L ́ARTE Y EL TORCHIO, Cremona, Italia; 2007, Premio a la Excelencia, del Honorable Senado de la Nación, Argentina; 2002, “Arqueología urbana”, exposición individual, Centro Torrente Ballester, dentro del XVI Premio Internacional de Grabado, “Maximo Ramos”, El Ferrol, La Coruña, España.Leonardo Gotleyb en su taller (Eduardo Grossman)Leonardo Gotleyb en su taller (Eduardo Grossman)

También fue jurado en 2006, de la VII Trienal Internacional de Arte de Majdanek, Lublin, Polonia, y en 2003, de la V Trienal Internacional Gráfica de Bitola, Macedonia.

Emotiva donación de un cuadro de Biagetti al Museo Regional Emma Nozzi

Fuente: Noticias Net ~ El director del Museo Regional Emma Nozzi, Jorge Bustos, destacó la donación de un cuadro y un caballete que perteneció al pintor Alcides Biagetti, realizada por el empresario Alberto Pozzo Ardizzi.

La donación se realizó en el transcurso de esta semana, en el marco de un acto muy íntimo, producto de la pandemia de coronavirus. Tuvo lugar en el museo regional.

Donación

En conversación con NoticiasNet, Bustos informó que del acto participaron, entre otros, los Amigos del Museo, y algunos vecinos comprometidos con el arte y el patrimonio de la ciudad de Carmen de Patagones. Por cuestiones personales, Alberto Pozzo Ardizzi no pudo estar.

Asimismo, resaltó el gesto del empresario “de desprenderse de un objeto tan preciado y tan bellos, que en realidad son dos, el cuadro y el caballete de trabajo. Para el Museo esto significa tener una tercera obra del gran artista Biagetti”.

Pero además, “hay otro rédito que saca el museo, que es dar cuenta de la confianza que la gente de Viedma y Patagones al hacer estas donaciones, porque saben que los objetos aquí estarán bien resguardados. Cada vez que se recibe una donación es un gesto de confianza que nos fortalece”, afirmó Bustos.

Con respecto al empresario, señaló que “’Cholino’ (como llaman al empresario) siempre es muy generoso con las instituciones, por eso digo que más que valorar el esfuerzo económico, en este caso valor es el desprendimiento de algo tan bello, y de permitir que lo disfrute la comunidad toda”.

Fotografías y revista

En el mismo acto, María del Carmen Muzzarello, donó unas fotografías muy bellas tomadas muy poco después de la muerte de Biagetti en su atelier, de hecho en esa foto está este cuadro y caballete.

El periodista Carlos Espinosa fue otra de las personas que hizo una donación. En este caso, se trata de una revista de la década de 1950, que contiene una nota a Biagetti exponiendo en Buenos Aires, con muy buenas fotografías.

Además, también participó Liliana Parodi, una artista plástica y docente de la escuela Alcides Biagetti, quien leyó un poema de su autoría.

Liliana Parodi expresó que el Museo es una extensión de la escuela, y  que de algún modo sus alumnos hacen una inversión en la obra de Biagetti, logrando que sus estudiantes tengan un contacto más directo con esta fina estética y esta ética de vida que lo marcan como artista.

 “Leyó un poema muy sensible, que nos emocionó a todos, y con eso se cerró el acto» resaltó Bustos.

Una artista del grafiti se convierte en la impensada cronista de la crisis afgana

Fuente: La Capital ~ Con la toma de Kabul por parte de los talibanes hace diez días y ante la promesa del retorno de una ley islámica estricta, las mujeres afganas enfrentan un presente de reducción de derechos como la libertad de movimiento o el acceso a la educación y la reparación de antiguas prácticas como el matrimonio forzado. En ese contexto caótico, artistas e influencers eliminan historias y posteos de las redes, mientras que un puñado, persiste y narra desde Instagram el estado de situación de Afganistán. Entre estos últimos está Shamsia Hassani, la primera grafitera de un país que lleva décadas en guerra.

Apenas los talibanes tomaron la capital, haciéndose con el control total del país en una operación relámpago, y mientras los medios replicaban el video de un avión militar estadounidense carreteando entre una muchedumbre de afganos que lo corrían intentando subirse, adelantado el retiro de tropas de Estados Unidos y de la Otán acordado para el 31 de agosto, los comerciantes eliminaban carteles de propaganda con rostros femeninos, las jóvenes se deshacían de la prueba de sus estudios, otros limpiaban sus cuentas digitales y, sobre todo las mujeres, evitaron la calle, salpicada de talibanes armados.

Un día antes, el sábado 14 de agosto, Shansia Hassani, muralista feminista de 33 años reconocida a nivel mundial y hasta ese momento docente de la Universidad de Kabul, posteaba la imagen de una joven pintada en colores vivos, llevando, encendida en una maceta, una flor de panadero que ofrenda a una figura negra, armada y con ojos rojos, sobre un fondo también negro. “Tal vez sea porque nuestros deseos han crecido en una olla negra”, decía la publicación, que por estas horas supera los 53.000 likes.

Cuatro días después, el miércoles 18, la probabilidad expuesta por Hassani en esa primera imagen devino ruina y desolación. El corte subido a Instagram muestra a la niña, postrada y de rodillas, ante las botas oscuras de la figura oscura. La maceta caída, la flor de panadero deshojándose en el suelo. Los contornos de la ciudad bordada en su vestido ya no están, desaparecen a la par que avanzan las incertezas de los habitantes de cada pueblo afgano, a la espera de conocer el tipo de sharia, ley islámica, que impondrán los talibanes.

En “Muerte a las tinieblas”, su potente pintura, resuena el temor de la población a que el nuevo gobierno aplique una sharia dura como la del régimen talibán que rigió en los 90, cuando se hacían ejecuciones públicas, se amputaban manos y pies por robo o se castigaba el adulterio apedreando a las mujeres. También resuena el miedo provocado por la ambigüedad del portavoz de los talibanes, Suhail Shaheen: “Las reglas islámicas —dijo— dependerán del gobierno islámico”, sin dar más precisiones.

El día que los talibanes tomaron el poder, Shaheen dijo a la cadena de noticias británica BBC que “no habrá venganza contra nadie” y que las mujeres “no deberían estar asustadas” porque “estarán en mejor posición que en el pasado”, pero las historias de campo son diferentes.

“La gente finge una normalidad en la calle —dice un afgano de Mazar-i-Sharif— pero nada es normal. Puedo sentir el miedo en mis huesos cuando salgo. Los talibanes están en todas partes”, publica en voz de un anónimo la BBC. El periódico inglés The Guardian recoge el testimonio de una veinteañera: “Ya no puedo reírme a carcajadas, no puedo escuchar mis canciones favoritas, no puedo encontrarme con mis amigos en nuestro café favorito”.

El mismo día, el artista Omaid Sharifi, cofundador y director de Art Lords, colgaba en Twitter un video del más vívido presente que a su vez proponía un ejercicio de memoria. Mostraba a tres jóvenes que seguían trabajando un mural urbano más allá de la ocupación y tuiteaba: “Buenos días #Kabul. Estamos pintando un mural hoy, ahora. Me recordó la famosa escena de «Titanic» donde los músicos tocan hasta que el barco se hunde. Espero que estés disfrutando al ver nuestras miserias, mundo”.

Hacer arte con el anterior gobierno talibán, entre 1996 y 2001, se había vuelto peligroso: desaprobaban la música y habían prohibido todas las formas de represión de la figura humana. Y con esta nueva vuelta, hasta la Unesco pidió proteger el patrimonio cultural de Afganistán, justo a 20 años de la destrucción de los Budas de Bamiyán, estatuas monumentales talladas en un acantilado entre los siglos V y VI. Dinamitadas y destruidas a disparos de tanques en 2001 por el régimen de ese entonces, que las consideró ídolos y entonces ofensivas del Corán.

Shamsia sigue posteando

En este contexto Shamsia Hassani sigue posteando. Su cuenta de Instagram acumula 196 mil seguidores. “Queridos todos, gracias por pensar en mí en este momento. Sus mensajes y comentarios muestran que la humanidad y la bondad siguen vivas y no tienen límites. Gracias por su preocupación. Estoy a salvo”, posteó hace tres días la muralista que, dos semanas atrás, salía a las calles kabulíes del intervencionismo armado estadounidense, para usar como lienzo los frentes destrozados de los edificios dañados por las bombas y por las ráfagas metralla de la guerra .

Compartiendo perfil con una de las emblemáticas mujeres que pinta, con ropa tradicional y sin burka ni boca, en la imagen subida a las redes Hassani aparece con barbijo y hiyab, el velo para cubrir cabeza y cuello que la antigua Sharia obliga a usar a las mujeres musulmanas- y que no siempre simboliza la opresión que le adjudica Occidente.

“Elegir usar el burka o el hiyab no es el problema; las mujeres no serán verdaderamente libres hasta que puedan hablar por sí mismas y ser escuchadas. Quitarse el pañuelo no es lo mismo que liberarse”, advertía en una entrevista en torno a una serie de pinturas titulada “Secret”. Nacida como refugiada en Teherán en 1988, nunca estudió arte, no se lo permitían por extranjera en las escuelas iraníes. Ahora es la profesora más joven de la Universidad de Kabul, en Bellas Artes y Escultura.

Su mirada crítica no hace concesiones: una de las ilustraciones posteadas reproduce un billete de un dólar donde la figura central es una de sus chicas que, asomándose por el circulo que antes enmarcaba a George Washington, estira lo brazos para tomar de un extremo el billete y correrlo para mostrar lo que esconde debajo: tanques de guerra asolando una ciudad que no es la propia.

Cuando regresó a Afganistán, con 17 años, se puso a explorar formas de usar el arte para encubrir las marcas físicas negativas de la guerra. “Quiero que mi arte conviva con la gente y se convierta en parte de su vida diaria, compartirlo con quienes no tienen acceso a exposiciones. Muchas veces hago a mis personajes con ojos cerrados sin boca, pero con un instrumento musical deformado que les da la habilidad y la confianza de hacer sonar su propia voz con fuerza”, explicó a The Guardian.

Ella dice en esa nota: “Cuando la gente me ve haciendo grafitis me insultan, maldicen y a veces lo llaman pecado. La gente en Afganistán no está en contra del arte, sino en contra de las mujeres que hacen arte”.

Es cofundadora de Berang Art Organization, un grupo dirigido por artistas que promueve el arte y la cultura contemporánea en Afganistán a través de programas, talleres, seminarios y exposiciones. Su trabajo se ha mostrado en Afganistán, Australia, Dinamarca, Alemania, Irán, India, Noruega, Suiza y Vietnam, donde también ha participado en conferencias y talleres.

Por esta horas, sus obras comparten en cadenas espontáneas de Facebook y Whatsapp, de la mano mano de jóvenes colegas exiliadas, preocupadas por la situación de sus coterráneas, como la grafitera Malina Suliman, que ahora desde India desafía la cultura patriarcal musulmana, especialmente el burka azul que tuvieron que usar obligadas durante años, autora de un icónico y criticado mural esqueleto con burka que por estos días se reproduce en las redes.

En la última historia, publicada hace un día, Hassani se muestra sentada frente al mural de una de las chicas que suele pintar sin burka ni boca y con un invariable instrumento musical aportándole voz, al pie de una autopista que bordea a la Estatua de la Libertad y sigue su camino.

Su sitio web https://www.shamsiahassani.net sigue funcionando.

La artista argentina Ad Minoliti, entre lo más destacado del calendario 2022 de la Tate Gallery

Fuente Infobae ~ La Tate de Londres anunció el calendario de exposiciones más destacadas para 2022 entre las que incluyó la muestra Biosfera Peluche, de la argentina Ad Minoliti, una artista joven que con sus collages resignifica la tradición de abstracción geométrica y se expide sobre el componente misógino o sexista de la historia del arte, y que en esta ocasión presentará en la sede Tate St. Ives una serie de obras que dan cuenta de universos alternativos influidos por el pensamiento feminista y queer.

Se trata de la misma exposición que se puede ver actualmente en el Baltic Centre for Contemporary Art en Newcastle, también en el Reino Unido, y que se trasladará del 28 de mayo al 30 de octubre de 2022 a la Galería Nacional de arte británico y arte moderno de Inglaterra, compuesta por cuatro museos, en este caso a la sede con espectacular vista a la playa de Porthmeor y al océano Atlántico.

Además, parte del museo inglés se transformará en un aula activa para el proyecto en curso de Minoliti bautizado La Escuela Feminista de Pintura, una instalación, obra site-specific y espacio activo que busca modificar el modo en que se enseña la teoría y la práctica artística, que revisa los géneros tradicionales de la pintura y que se vio en octubre de 2019 en el Museo de Arte Moderno de Buenos Aires, como parte de la colorida exposición Museo Peluche.

“Mi trabajo busca una geometría no binaria usando las teorías queer y feministas como herramientas de deconstrucción de la tradición pictórica y de los prejuicios de la historia del arte que mantienen el sistema actual, no solo en la industria, sino también en la educación artística y las instituciones”, dice la artista Ad Minoliti (Buenos Aires, 1980) invitada a exhibir en 2019 en la Bienal de Venecia, bajo el lema “May You Live in Interesting Times”.

En su idioma original, Biosphere Plush es la primera exposición individual de Minoliti en el Reino Unido, un despliegue de formas geométricas de colores vibrantes, estridentes, a través de murales, pinturas y objetos, con reminiscencias al Arte Madí y abstracto, pero que pone en primer plano imágenes por fuera de los patrones culturales tradicionales: un derroche lúdico, sensible, amoroso. O dicho de otro modo: todo aquello que fue negado por la modernidad artística."Biosfera peluche" es la primera exposición individual de Minoliti en el Reino Unido
(Télam)«Biosfera peluche» es la primera exposición individual de Minoliti en el Reino Unido (Télam)

La muestra es concebida como una “especulación crítica” a lo que fue en el año 1984 el extraño experimento científico de confinamiento llamado Biosfera 2, una suerte de ensayo utópico que terminó con sus participantes al borde de la muerte por el hambre y la falta de oxígeno: un experimento lanzado en el desierto de Arizona, financiado por el magnate del petróleo Ed Bass, creado para estudiar si los humanos podían crear y mantener la vida en un entorno artificial como las estaciones espaciales.

El equipo de B2 “intentó -con el consiguiente fracaso- aislar a ocho personas (todas ellas estadounidenses blancas y una europea) durante dos años, un ejemplo perfecto de que la carrera espacial es una empresa colonizadora extractivista, que favorece los intereses de los ya poderosos -incluidas las grandes instituciones económicas y militares- y agrava los procesos perjudiciales preexistentes, como las guerras, la desigualdad económica y la degradación medioambiental”, en palabras de la curadora de la muestra, Irene Aristizábal.

Biosfera Peluche -realizada en colaboración con el Centre de Création Contemporaine Olivier Debré, Tours, de Francia, donde Minoliti presentará una exposición individual en octubre próximo- pretende trabajar en la dirección opuesta a Biosfera 2, por lo que su entorno ha sido concebido como un centro comunitario abierto a todos, que ofrece un espacio para la educación y la fantasía feminista interseccional.

– ¿Cómo surgió esta invitación a exponer en Tate St Ives, y cómo recibiste la noticia?

– La curadora en jefe Irene Aristizábal, de la muestra Biosfera Peluche en Baltic UK, me contó que estaban en conversación para llevar la muestra a otros espacios y luego me confirmaron que se lleva el mismo proyecto de Baltic allá. Es una buena noticia, sí, más en la pandemia.

– ¿Cómo resumirías las principales preocupaciones que atraviesan tu obra?

– Me gusta cómo Irene, la curadora, define este proyecto en particular. En general mi trabajo busca una geometría no binaria usando las teorías queer y feministas como herramientas de deconstrucción de la tradición pictórica y de los prejuicios de la historia del arte que mantienen el sistema actual, no solo en la industria, sino también en la educación artística, y las instituciones.

– ¿Cuándo y de qué manera el pensamiento feminista se hizo presente en tu trabajo?

– Desde 2008, más concretamente pude acceder a otro tipo de contenidos que no circulaban en la escuela de arte desde ya, y tampoco en otros lugares como galerías, ferias, museos, donde feminismo era mala palabra o innombrable. Todavía vemos como ahora que artistas feministas son atacadas por fascistas en las redes y con la difusión de medios masivos, el panorama intelectual sigue siendo muy reaccionario. Pero gracias a las publicaciones independientes, fanzines, investigadores, teoricxs y/o activistas como Nicolás Cuello, Laura Contrera, Lucas DiSalvo, entre muches otres, editoriales como Profundo Ediciones, Viciosa Editora, que generan ferias y difusión que crece día a día, gracias a esta resistencia y estos circuitos que también se da por fuera de las instituciones, es que pude entender aquello que sentía que estaba mal y no tenía las palabras para identificar, como modos sistemáticos de expulsión.Ad Minoliti es una artista joven que con sus collages resignifica la tradición de abstracción geométrica y se expide sobre el componente misógino o sexista de la historia del arte.
(Télam)Ad Minoliti es una artista joven que con sus collages resignifica la tradición de abstracción geométrica y se expide sobre el componente misógino o sexista de la historia del arte. (Télam)

– ¿Cómo concebís La Escuela Feminista de Pintura?

– La Escuela Feminista de Pintura es una instalación mural que se activa con clases de distintas colaboraciones. Y van cuatro ediciones de este proyecto (Kadist San Francisco 2018, MAMBA 2019, Gwangju Biennale 2021, Baltic 2021), la quinta será en Francia en el Centre de Création Contemporaine Olivier Debré a partir de noviembre de este año y la edición en St Ives será la sexta. Es un formato que se adapta a los sitios específicos de cada espacio: físicamente como murales, armando bibliotecas que acompañan y adaptándose al programa local de colaboradores.

– ¿Cuáles son tus principales cuestionamientos al modo en que se enseña la teoría y la práctica artística, tanto desde el diseño del espacio como desde el contenido de sus clases?

– Mi proyecto se basa directamente en el Método Diana Aisenberg junto con la experiencia interdisciplinaria que fomentó el Centro de Investigaciones Artísticas, con fuerte critica a los medios tradicionales de las escuelas y universidades que negocian con la educación en bases competitivas y elitistas, cuando las artes visuales para mí son el mejor espacio para la colaboración y experimentación de prácticas de diversos campos.