Fuente: Museo Nacional de Bellas Artes ~ Con curaduría de Marta Penhos, el artista holandés presenta sus obras en diálogo con pinturas del Museo, que indagan sobre la generación de basura, el consumo y el descarte.
El Museo Nacional de Bellas Artes inauguró “Rob Verf. Vanitas”, la muestra con curaduría de Marta Penhos que reúne en el segundo piso obras del artista nacido en los Países Bajos, pero de larga trayectoria en la Argentina, vinculadas a la idea de la “vanitas” contemporánea, en diálogo con piezas históricas de la colección institucional.
“Estamos felices de presentar esta exposición de un artista ‘mixto’, ya que Rob Verf se ha formado en los Países Bajos, pero reside desde hace más de 20 años en Argentina, donde ha desarrollado una obra potente y original que tiene mucho que ver con la realidad de nuestro país”, expresó el director del Museo Nacional de Bellas Artes, Andrés Duprat, durante la apertura, de la que también participaron el artista holandés y la directora artística del Museo, Mariana Marchesi. “Esta exposición ‒explicó‒ revela las indagaciones conceptuales y pictóricas de Verf sobre un aspecto característico de la modernidad en las urbes, la generación de basura, a través de una mirada de rayos x que intenta desentrañar sus incógnitas”.
“Sus pinturas ‒continuó Duprat‒ se fundan y sostienen un vínculo estrecho con las tradiciones pictóricas de los Países Bajos y, a la vez, en el contexto de la colección del Museo, establecen una conexión con obras clave que abordan de modos diversos la fugacidad de un momento, como ”Composición con reloj”, de Diego Rivera, o “Naturaleza muerta”, de Jan Fyt, entre otras.
“Esta muestra nos permite una doble constatación: el modo en que las obras maestras históricas inspiran a las producciones actuales, y cómo el arte contemporáneo es capaz de iluminar y recrear el pasado y la tradición”, concluyó el director del Bellas Artes sobre la propuesta curatorial.
La naturaleza muerta, género barroco por excelencia, y una de sus derivaciones, la vanitas, es en la producción de este artista una plataforma para reflexionar acerca de las sociedades actuales, atravesadas por el consumo y el descarte de los objetos.
En las imágenes de Verf, la frontera entre la utilidad y el desecho actualiza la tradición de la “vanitas”, con su reflexión acerca de lo efímero de la vida, el inexorable paso del tiempo y la muerte. Las obras exhibidas ‒entre las que hay pinturas, un video y una instalación compuesta de 53 fotografías‒ reúnen y ponen en diálogo impresiones e ideas que provienen de sus experiencias en Rotterdam y en Buenos Aires.
Entre el público que participó de la inauguración, se encontraba la flamante embajadora de los Países Bajos en la Argentina, Annemieke Verrijp, que recorrió la muestra de Verf en su primera actividad oficial.
Tras agradecer al Museo, Verf remarcó que esta exposición es una gran oportunidad para ver la serie completa de pinturas de gran porte que integran la instalación “Resonancia magnética”. “Para mí es algo nuevo poder ver todas las obras juntas”, manifestó.
Sobre su labor artística, Verf comenta: “Investigo la basura en las calles de distintas ciudades. Cómo está dispuesta. Cuál es su expresión. Es para mí una fuente de inspiración. Los residuos del consumo representan a la sociedad que los produce. En conjunto, muestran la futilidad, la evanescencia de los placeres mundanos, que destaca el motivo de la vanitas, íntimamente ligado a la pintura del país de donde vengo. En la Argentina, el tema se ha vuelto más rico y complejo”.
En la inauguración, Duprat también destacó el texto curatorial de Penhos, incluido en el catálogo de la muestra, que ilumina y marca líneas de unión entre el proyecto “Vanitas” de Verf y obras de la escuela holandesa, pero también del arte argentino de la institución.
Como sostiene la curadora en el catálogo, “el motivo barroco de la fugacidad de las cosas terrenales, que solo dejan restos, huellas del esplendor y la prosperidad pasadas, es el eje sobre el cual gira el conjunto de trabajos que presenta Rob Verf: una obra indudablemente contemporánea que, a la vez, tiende un puente con la tradición artística y cultural de los Países Bajos”.
En la exposición, 14 creaciones de este artista ‒con referencias a Pieter de Hooch, Rembrandt, Pieter Claesz y Johannes Vermeer‒ se conectan con otras once pinturas clave del acervo del Museo, también vinculadas a la fugacidad de un momento, entre ellas, “Composición con reloj”, de Diego Rivera; “Duraznos y cerezas”, de Pierre-Auguste Renoir; “Sombra en la ventana”, de Emilio Pettoruti, y cuadros de naturaleza muerta de Georges Braque, Jan Fyt, Lía Correa Morales, Severo Rodríguez Etchart y Aquiles Badi.
“En forma semejante a lo que sucede en los cuadros holandeses y en las pinturas de Rob Verf, los objetos que forman estas estructuras expresan a las personas, individual y colectivamente, y muestran el paso del uso y el disfrute al descarte y el abandono”, analiza Penhos.
“Rob Verf. Vanitas”, podrá visitarse hasta el 9 de octubre en el segundo piso. El Museo Nacional de Bellas Artes, que depende del Ministerio de Cultura de la Nación y cuenta con el apoyo de Amigos del Bellas Artes, está ubicado en Av. del Libertador 1473 (Ciudad de Buenos Aires) y abre sus puertas de martes a viernes, de 11 a 20, y sábado y domingo, de 10 a 20. La entrada es libre y gratuita.