Fuente: Perfil ~ Museo Nacional de Bellas Artes y Malba Puertos, forman parte de las nuevas propuestas de espacios artísticos visuales con circuitos por fuera del edificio.
Conforme llega el verano, los museos y muestras de arte trasladan diversas propuestas artísticas en espacios al aire libre para la mejor circulación del público, vinculando la apreciación y la curaduría con lo sensorial de la naturaleza. Los proyectos del Museo Nacional de Bellas Artes y Malba Puertos, junto con los murales barriales, son referentes de esta nueva tendencia que se están desarrollando para este año y comienzos del próximo.
El Museo Nacional de Bellas Artes, ubicado en Avenida del Libertador 1473, en pleno barrio de Recoleta, se llevará a cabo un nuevo espacio de exhibición. El Paseo de Esculturas está conformado de dos mil metros cuadrados, al aire libre, al que accederá desde el museo o la calle, ubicado entre el edificio principal y el Pabellón de exposiciones temporarias.
La nueva propuesta contempla la ampliación arquitectónica que conectará todos los pisos del edificio gracias a este camino de circulación que se abrirá al público. Y como anticipo, se presentó la primera obra, «Marejada» (1970), de la artista Noemí Gerstein, producto de la primera edición del Programa Bellas Artes Nuevas Adquisiciones de la Asociación Amigos del Museo.
Las obras contempladas que se sumaran son de artistas como María Juana Heras Velasco, Émile Antoine Bourdelle, Enio Iommi, Julio Le Parc y otros, que circundan el edificio. Por otro lado, se suma a la lista de las seleccionadas del acervo a ser instaladas «La danza” de Pablo Curatella Manes, “Jinete a caballo” de Marino Marini, “Torso” de Antonio Sibellino, “El deseo” de Líbero Badii y “Torso” de Rogelio Yrurtia.
En esta misma línea, es el proyecto “Malba Puertos”, la ampliación y nueva sede del Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires (MALBA), fundado por el empresario y coleccionista Eduardo Costantini en 2001, que iniciará sus obras en breve y prevé ser inaugurado en Escobar, provincia de Buenos Aires.
El proyecto de 5.500 metros cuadrados combina una sucesión de salas y espacios públicos, jardines y bosques y se integra al circuito de arte público de la ciudad, erigiéndose a partir de un gran techo transparente de dos mil metros cuadrados apoyado sobre tres pabellones que contienen sala de exposiciones, aula infantil y servicios de 500 metros cuadrados.
Con un pabellón totalmente acristalado se exhibirán las cinco esculturas del tucumano Gabriel Chaile, presentadas en la última Bienal de Venecia y adquiridas por Costantini. En lo artístico, el programa será multidisciplinario y estará a cargo del comité curatorial del museo, con exposiciones de arte contemporáneo argentino, artistas federales, acompañada por actividades educativas y culturales al aire libre con música, cine, literatura, danza y teatro.