Luis Battaglia, un arquitecto y escultor mendocino que combina proyectos de lujo con arte popular

Fuente: Diario UNO – Fue parte de la creación del resort Los Chozos, en Alto Agrelo y al mismo tiempo está creando un espacio cultural en Godoy Cruz abierto a la comunidad artística.

El trabajo del arquitecto y artista mendocino Luis Battaglia podría definirse de muchas formas, pero quizás la más cercana definición, fuera la más lejana a aceptar la realidad tal y como esta se presenta.

Es que el artista y creador de innovadoras obras de arquitectura que, sin dejar de ser de lujo, se presentan como un desafío a los materiales convencionales, no quiere ser el mejor en nada. Solamente quiere dejar una huella y que sus creaciones inviten a pensar el mundo de otra manera, a través de las ideas y de las formas.

Cada obra de Battaglia, desde las arquitectónicas, hasta las escultóricas, son una invitación a mirar desde una nueva perspectiva una realidad que parece completamente pensada.

Esta idea fuerza es transversal a todas las creaciones del artista. El metal, el hierro, la totora, podrían convertirse perfectamente en chatarra. Pero en las manos de Battaglia, están listas para resignificarse.

La búsqueda de Battaglia es la de no aceptar la realidad tal como es, sino resignificarla a través del arte.

La búsqueda de Battaglia es la de no aceptar la realidad tal como es, sino resignificarla a través del arte.

Las dos caras de un artista

Un arquitecto de obras de lujo y un escultor que cree y que quiere que el arte esté cerca de la gente. Estas dos caras –y podría decirse que muchas más- conviven en Luis Battaglia.

“Yo estudié arquitectura de grande, comencé la facultad a los 37 años. Esto me sirvió para muchas cosas, principalmente porque es parte de mi búsqueda de supervivencia. Lo que he hecho siempre es tratar de sobrevivir, nunca he tenido esa constancia de hacer siempre lo mismo, no he podido replicar eso. Lo que pasa es que una vez que domino una técnica la descarto”.

En este derrotero, Battaglia el artista, llamó a Battaglia el constructor. En esa fusión nacieron grandes creaciones.

El artista en plena faena creativa

El artista en plena faena creativa

Una de ellas es haber formado parte, junto al artista Sergio Roggerone, de la creación de Los Chozos Wine House, en Alto Agrelo, Luján de Cuyo.

Se trata de un resort de 15 casas de lujo, y un conjunto de glamping ubicados en un terreno de 800 hectáreas que pertenece al grupo Young Woo and Associates, cuyos dueños, en sociedad con el grupo local Armentano, desarrollaron este proyecto.

Battaglia, el arquitecto, destaca la utilización de los materiales y las formas, que remiten a una arquitectura andina, inspirada en viejas culturas nativas.

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La zona de glamping del resort Los Chozos Wines Houses, en Agrelo, Luján de Cuyo. Están cubiertos por un tejido de totora, realizado con una técnica ancestral

La zona de glamping del resort Los Chozos Wines Houses, en Agrelo, Luján de Cuyo. Están cubiertos por un tejido de totora, realizado con una técnica ancestral

En cuanto a los glamping, se trata de una serie de domos para los que también se utilizaron técnicas ancestrales de las comunidades prehispánicas, esta vez involucrando el tejido de totora para la construcción.

El concepto que Battaglia trabajó con Roggerone fue el de esculturas habitables.

En los Chozos se colocaron pisos de cerámica esmaltados, que son obra de Battaglia y luego, Roggerone y el grupo Armentano le propusieron hacer los glamping.

Así se ve el tejido con el que se cubrieron los glamping de Los Chozos.

Así se ve el tejido con el que se cubrieron los glamping de Los Chozos.

Fue una experiencia fabulosa, para mí era un desafío artístico generar estas unidades habitacionales escultóricas. Le estoy muy agradecido a Sergio y a Nicolás (Armentano) , que fueron los que me convocaron para el proyecto

El autor de bajo perfil detrás de obras gigantes

Battaglia es un autor de bajo perfil que realiza obras gigantes. Esta no es una definición poética, sino literal de lo que hace el escultor mendocino.

El espacio de trabajo de Battaglia dentro de su atelier, en donde proyecta y le da forma a sus ideas.

El espacio de trabajo de Battaglia dentro de su atelier, en donde proyecta y le da forma a sus ideas.

Una de sus obras más conocidas y al mismo tiempo, desconocidas, es la escultura que recibe mendocinos y turistas en la entrada al aeropuerto de El Plumerillo, en Las Heras.

La escultura se denomina “Origen” y tiene que ver con representar en una obra toda la matriz productiva de la provincia, que no comienza y termina con la vitivinicultura.

Allí está reflejada la agricultura, la metalmecánica, el petróleo, la minería y hasta se recuperaron cadenas de barcos antiguos para que también cobraran identidad los inmigrantes. Se construyó con materiales reciclados de empresas mendocinas y muestran todo el proceso que tiene la industria provincial.

Todas las obras de Battaglia son conceptuales. Se basan en algo que el artista tiene para decir y para lo que no bastan las palabras.

Todas las obras de Battaglia son conceptuales. Se basan en algo que el artista tiene para decir y para lo que no bastan las palabras.

Es una escultura, literalmente, gigante: está compuesta por 250.000 kilos de hierro, entre todas las piezas que se ensamblaron para construirla y tiene casi 240 metros lineales de recorrido.

Si bien está construida para que se vea a la velocidad que los autos transitan por la ruta, es importante detenerse a analizarla.

Algunas de sus obras, que componen su atelier podrían estar perfectamente en la calle. Es el caso del toro andino (que es parte de otro proyecto que Battaglia prometió contar en un futuro cercano) y otras piezas, que también pueden tener un fin decorativo, como grandes lámparas y portones.

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Un arte abierto al público

Si bien hay tantas maneras de definir el arte como artistas, críticos y espectadores, existen dos concepciones muy básicas: una tiene que ver con el arte solo reservado para elites exclusivas, que lo colocan en una especie de “salón vip para entendidos”, y otra, que apuesta por un arte popular, que no solo se coloque en un pedestal, sino que esté cerca de la gente.

Un arte cuestionador de las estructuras dadas, que interpele. Un arte para tocar y para transformarse con la comunidad.

En este sentido, Battaglia pensó en abrir su atelier al público y ese es su proyecto en un futuro muy cercano.

Su espacio de trabajo se convertirá en un espacio cultural, sala de exposiciones, y también sumará una propuesta gastronómica tanto para los vecinos de Godoy Cruz, como para quienes se quieran sumar a la experiencia.

El lugar llama la atención inmediatamente que uno pasa por la zona de la calle Paso de los Andes, a la altura de Villa Hipódromo.

Se trata de un inmenso galpón, intervenido por el artista, en el que convivirán sus enormes esculturas –todas ellas conceptuales- con las de artistas que encontrarán un lugar para exponer y vender sus trabajos, al igual que Battaglia.

Si bien Battaglia asegura no

Si bien Battaglia asegura no «comprometerse» del todo con ninguna técnica, muchas de sus esculturas son en base a hierros y metales soldados

El lugar abrirá en los próximos días y mientras se ultiman los detalles, Battaglia se da tiempo y espacio para contar, recibir y comunicar todo lo que casi no le entra en las palabras.

Hay que conocer al artista y a su obra para terminar de entender de qué va este personaje de la cultura mendocina.

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