Fuente: Cronista ~ Cloe Galasso será protagonista de la celebración del Día de la Mujer en el consulado de la Argentina en Nueva York con su exposición «Sororal».
El arte joven argentino aterrizó en la Gran Manzana de la mano de Cloe Galasso, protagonista indiscutida de la celebración del Día de la Mujer en el consulado de la Argentina en Nueva York con su exposición «Sororal«. La invitación surgió como reconocimiento a su obra multidisciplinaria, que viene exponiéndose en distintas galerías desde 2021, cuando debutó en el extranjero en la Nysa Gallery, para no detenerse más.
Al conocerla, el célebre artista argentino Eugenio Cuttica la integró a su equipo de trabajo en Los Hamptons, y rápidamente se sucedieron más muestras y el elogio de sus pares y la crítica, lo que la llevó también a presentar sus cuadros en Italia y en su Buenos Aires natal. El 8 de marzo representará a su país en la sede de la capital cultural norteamericana, con apenas 26 años.
– ¿Hay una composición entre tus obras y tu cuerpo? Muchas veces oficias de modelo posando con ellas…
– Comencé a pintar cuerpos como un escape y una crítica a la cosificación de las mujeres, y de su cuerpo objeto. Una problemática que lamentablemente viví a flor de piel cuando trabajé en el modelaje.
– ¿Cuándo te descubriste artista?
– Sabia que quería ser artista pero no sabía cómo. En un momento me senté conmigo misma para sincerarme y me di cuenta que si quería lograrlo tenía que enfocarme y trabajar. En ese momento de quiebre en mi vida volví a Buenos Aires a despedirme de mi abuelo que partía de este mundo, y me sorprendió, como a todos, la pandemia, que prohibió que pudiera volver a viajar al lugar que consideraba mi nuevohogar. Entonces me encerré en mi pequeño departamento y me peleé con los antiguos oleos y pinceles de mi mamá hasta que logré entender cómo utilizarlos y cómo pintar. Durante los meses de encierro pinté y trabajé en mi escultura todos los días, con una rutina que hoy en día envidio porque no logro aplicar con tanta constancia como en ese momento.
– De crear a mostrar la creación hay un gran paso. ¿Cómo te animaste?
– A fines de ese mismo año un colega artista vino a mi casa, vio toda mi producción y me insistió en que debía mostrarla. En marzo del 2021 realicé mi primera exposición individual en Galería Gascón en la ciudad de Buenos Aires. Después realicé un viaje a Estados Unidos, donde la pandemia volvió a cambiar mis planes. A una semana de llegar, la Argentina cerró las fronteras y me quedé parada en territorio estadounidense. Comencé a ver qué podía hacer para aprovechar el tiempo. Ahí decidí volar a Nueva York, para poder trabajar en un taller y realizar una suerte de residencia artística. Así llegaron unas mentorías con artistas como Taka Maruno y Maurizio Pellegrin. Al pasar dos meses y terminar mi tiempo en el taller quería volver a Buenos Aires pero la aerolínea no retomaba el trayecto ni me brindaba opciones. La verdad que no tenía el dinero para invertir en otro vuelo, y el dinero prefería usarlo para sobrevivir en esa gran ciudad. La vida por suerte me llevó a un grupo hermoso de personas, unos chicos argentinos que viven allí que me adoptaron y cuidaron mucho. Uno de ellos vio lo que pintaba y me quiso presentar a un amigo que vive en las afueras de Nueva York, y así conocí el Campo Cuttica, donde Eugenio me ofreció ser su asistente a cambio de vivir allí y realizar una residencia artística. A fines de ese año pude por fin regresar a la Argentina, y con todo el lio que hice en la aerolínea me quedó en el tintero un vuelo Buenos Aires – Nueva York que no iba a perder. Entonces en junio del 2022 tomé mis cositas y volví a partir para Nueva York, pero ya más armada, con muchos amigos y personas que me esperaban.
– ¿Por qué el mundo para desarrollar tu obra? ¿Qué te da hoy EEUU que no te de Argentina?
– Me encantaría poder desarrollarme como artista en mi país, pero siento que no tengo el espacio, siento que el circulo es muy cerrado. Mientas que el mundo me llena de oportunidad acá me cuesta poder decir que soy artista porque muchas veces se me cuestiona que no estudié en la academia o que no tengo la carrera suficiente como para poder nombrarme artista. Cada vez que me voy, lo hago con mucha angustia. Mi sueño es poder desarrollarme en mi país.
– ¿Qué te inspira?
– En la actualidad estoy enfocada en una práctica pictórica y escultórica. Mi trabajo se enfoca en el análisis de la energía. Me inspiro en la corriente pictórica metafísica y en las teorías de la metafísica china o como se denomina comúnmente, Feng Shui. Es un antiguo sistema filosófico chino que estudia el cielo y los movimientos energéticos que se realizar entre los astros y la tierra. Según esta disciplina, en nuestro mundo todo requiere energía, nuestros pensamientos, nuestras emociones, nuestra felicidad, nuestros miedos, nuestro optimismo. Mi interés corre por entender cómo utilizar esta energía, ya que me parece una parte clave para el existencialismo humano. En lo visual, me influencian artistas como Giorgio De Chirico, Vito Campanella, Salvador Dalí, y también otros creadores como Julio Le Parc.
– ¿Qué sigue?
– Me cuesta mucho pensar en lo que viene porque lo veo todo muy incierto (risas). Estoy feliz con la próxima exposición individual que tendrá lugar en el consulado de argentina en Nueva York. La apertura es el día 8 de marzo y se enmarca en el mes de la mujer. Además estaré participando también en marzo de otras dos exposiciones grupales….Planifico un año de mucho trabajo, tengo muchísimas ganas de comenzar a realizar esculturas de gran formato que puedan ser instalaciones. Quiero poder sumergirme en mi obra y necesito para eso que sea gigante.