Fuente: BAE – Una tendencia que evolucionó para convertirse en una herramienta poderosa. Orígenes y perspectivas.
El street art se afianzó con fuerza como forma de expresión urbana en muchas grandes capitales y Buenos Aires no es la excepción. Con grandes exponentes locales con proyección internacional como Martín Ron y circuitos turísticos que recorren estas galerías a cielo abierto, es una disciplina cuyas obras son muy valoradas. Desde hace un tiempo, también está en el radar de las marcas.
El street art ha evolucionado para convertirse en una herramienta poderosa dentro del marketing. Así lo indica un estudio de la agencia Another, que relata antecedentes de esta tendencia. En todas las grandes urbes de América Latina, el street art marketing ha generado una alianza entre artistas, gestores culturales, municipalidades y marcas para plasmar en paredes, edificios, techos, lonas e incluso la propia calle en arte vivo con una duración que promete cautivar a más de un potencial cliente.
Las paredes hablan
El grafiti moderno, tal como lo conocemos hoy, surgió en las décadas de 1960 y 1970 en grandes ciudades como Filadelfia y Nueva York. Lo que comenzó como vandalismo rápidamente se convirtió en una forma de arte única que requiere una gran habilidad técnica y un ojo agudo. En la época del Muro de Berlín, los manifestantes salpicaron el lado oeste de la muralla mientras que el lado este permaneció en blanco, hasta que cayó en 1989, abriendo nuevos lienzos de la noche a la mañana, indica Visit Berlin.
Cuando el grafiti surgió por primera vez en Estados Unidos, los grafiteros lo consideraban una competencia para ver quién podía ver su nombre más veces alrededor de la ciudad. Originalmente comenzaron con marcadores permanentes antes de pasar a la pintura en aerosol.
La evolución del arte con pintura en aerosol enfrentó una «guerra de estilos» en los 70 y principios de 1980. Durante este tiempo, comenzó a surgir el grafiti que conocemos hoy. Los artistas empezaron a expandir sus estilos y a retratar temas políticos y sociales, según información del Straat Museum, el museo de arte callejero y grafiti más importante del mundo.
Ciudad de México, Sao Paulo, Buenos Aires, Bogotá y más ciudades en la región están tapizadas de arte callejero. El mundo de las galerías tomó nota sobre la popularidad del street art, pero fue el auge de las redes sociales y la fama de artistas como Banksy, Vhils y Lady Pink lo que impulsó a una audiencia más amplia. Ahora, el grafiti como forma de arte se ha vuelto popular gracias a Internet, las redes sociales y Banksy.
En América Latina hay una enorme lista de muralistas que comparten su arte a través de campañas, desde Mariana Lorenzo una ilustradora mexicana conocida como Maremoto que ha colaborado con diversas marcas hasta el artista argentino Martín Ron, que fue nombrado uno de los 10 mejores muralistas del mundo, según la revista neoyorkina «Art Democracy».
Consejos para atraer clientes
La agencia compartió algunas estrategias efectivas para utilizar las redes sociales en la promoción del street art marketing:
- Mostrar el proceso creativo: A los espectadores les encanta ver a los artistas en acción. Publicar videos o fotos del proceso de creación del arte urbano o grafiti.
- Compartir la historia personal: Es importante compartir fragmentos de la historia del artista en las redes sociales. Esto puede incluir la inspiración detrás de su trabajo, sus desafíos y logros. Compartir estos detalles hace al artista más cercano y añade profundidad a su marca.
- Interactuar con la audiencia: Responder a los comentarios ayuda a construir una comunidad alrededor de la marca y el artista.
- Usar hashtags de manera efectiva: Usar hashtags populares relacionados con el arte, así como crear un hashtag único para la marca del artista.