Fuente: La Nación ~ Una nueva etapa marca el pulso de este depto, cuya inspiración está dada por el estilo de vida de su dueña y el paisaje de los Andes chilenos.
Todo cambio comienza con una decisión y aquí fue una mudanza. La dueña de esta vivienda dejó la comodidad de una casa en las afueras para instalarse en un departamento más adecuado a su vida, signada por los viajes y la rutina profesional.
El nuevo entorno en el barrio Lo Barnechea, a 15 minutos del centro de Santiago, presentaba características muy diferentes que se evidenciaron con la llegada de los viejos muebles. “No le calzaban”, describe la arquitecta e interiorista Paula Gutiérrez, quien se abocó a la tarea de redecorar este piso con dos cualidades notables: el hall de entrada de doble altura y la espectacular vista de la Cordillera.
Acento internacional
«Pasar de una casa a un departamento obligó a repensar el mobiliario. Sentimos que había que crear un relato y nos apoyamos en consagradas marcas europeas para hacerlo.»
Arq. Paula Gutiérrez, a cargo del interiorismo
Más texturas en el papel que reviste la pared y en la alfombra marroquí de bambú y cuero. La fotografía del archivo del Banco de Nápoles es del italiano Massimo Listri.
Las vistas sencillamente se potenciaron creando interiores sutiles, con guiños de color y una ligereza que contrasta con la presencia rotunda de los Andes.
Interiorismo asertivo
Área de paso o de estar, el living fue proyectado para el descanso visual con una paleta neutra que prácticamente hace flotar el mobiliario. El revestimiento de pared se trabajó con varias capas de pintura, elegida in situ. Una versión gris plata del sofá ‘Russell’ (Minotti) engama con el dúo de sillas ‘D.154.2′ (clásicos diseños de Gio Ponti que edita la firma italiana Molteni), el sofá con patas torneadas (George Smith) y las mesitas ovales.
El comedor está dispuesto sobre una alfombra de bambú y cuero cuya trama se asocia a las sillas esterilladas.
Un interiorismo con pocos elementos y gran diseño, hace de los colores, las texturas y el arte los verdaderos protagonistas del espacio.
Colores propios
En la intimidad del dormitorio principal, versiones más brillantes de los azules y verdes que distinguen el hall de entrada, ahora aplicadas en cálidos tapices, cortinas, lanas y linos.
“Es parte de mi trabajo entender los colores de cada cliente: todos tienen una paleta con la que se sienten cómodos, y en cada proyecto trato de descubrirla”.
Allá, la cordillera
Para la terraza, la titular del Estudio seleccionó uno por uno los muebles de Kettal, la firma española especializada en mobiliario para exteriores asociada a grandes creadores. Sofá ‘Mesh’ diseñado por Patricia Urquiola, sillones individuales ‘Basket’ con asiento de fibra, un diseño de los años 50 de Nanna y Jørgen Ditzel; mesa ratona ‘Bitta’ en aluminio y piedra y mesitas auxiliares ‘Roll’ (todo de Kettal).