Fuente: Télam ~ Con performances, visitas guiadas arrancó el jueves la primera de las tres jornadas del circuito organizado por Meridiano, con la participación de 60 galerías y obras de mil artistas en los diferentes espacios de la ciudad.
Con performances, visitas guiadas, algunos desajustes típicos del debut, el frío de la jornada y el público que acompañó arrancó oficialmente el jueves la primera de las tres jornadas de Nodo, el circuito organizado por Meridiano que celebra la escena del arte argentino contemporáneo, con la participación de 60 galerías y obras de mil artistas en los diferentes espacios de la ciudad.
Sin dudas, los espacios más convocantes de este amplio recorrido organizado por Meridiano -la Cámara Argentina de Galerías de Arte Contemporáneo-, que incluyó tres circuitos alrededor de los barrios de Palermo, Recoleta y La Boca fueron aquellos donde las galerías –además de estar abiertas- organizaron actividades especiales, como Benzacar y Rolf Art, donde los espectadores se sumaron a las performances allí desplegadas.
Sólo por tres días se despliega en la galería Benzacar la performance de Sofía Durrieu «Arco reflejo», que se vio en la última Bienal de Performance. Se trata de una suerte de postas donde el visitante podrá detenerse para interactuar con el operario de cada estación, sin tener jamás contacto físico directo; mediado una peculiar maquinaria -esculturas performativas- y una serie de acciones que pueden leerse como una suerte de ritual o ceremonia.
«Son tres dispositivos que articulan el contacto entre el performer y el público, son contactos muy precisos y muy específicos. Elegís la parte de tu cuerpo que vos quieras -pueden ser los dedos, o la espalda- y la idea es, con esto artefactos, saber si a pesar de todo este contacto hay posibilidades de reunión entre dos operarios», cuenta a Télam Gabriela Incola, responsable de Comunicación, Diseño y Programas Públicos de la galería Ruth Benzacar.
Varias personas respondieron a la propuesta del espacio en esta primera jornada de Nodo. Ya cayó el sol y esta suerte de estaciones de acupuntura están todas ocupadas, hay otras personas esperando para vivir la experiencia en este conjunto de esculturas performativas que proponen, median y articulan una serie de contactos muy específicos y regulados entre un operario y la persona que decide participar.
Hay algo de ritual, de ceremonial, en una zona de objetos que se disponen en el suelo al lado de cada una de las estaciones -velitas, un vaso de agua, pomada, pequeños objetos- en esta muestra que no encuentra sentido sin el espectador, y que invita a «ponerse bajo el orden del juicio, la decisión o los afectos de ese otro», como escribió Carlos Herrera en el texto de la sala.
Algunos aprovechan a visitar en la primera sala de la galería la muestra de Luciana Lamothe, «Fricciones», donde el propio visitante se vuelve una suerte de performer si es quiere ingresar a esa sala: hay que atravesar dos paneles de madera unidos en un vértice que impiden el paso fluido del público. Son varios los que preguntan si pueden pasar por ahí. Hay que hacer presión con todo el cuerpo sobre las maderas unidas para pasar al otro lado, literal y probablemente también simbólicamente, a una sala completamente vacía donde solo hay un espejo donde verse reflejado. Además, no se puede volver atrás ya que la única manera de salir de allí es directamente hacia la calle.
«Hoy hay más gente que lo habitual a raíz del comienzo de Nodo -dice Incola- y probablemente el día más convocante va a ser el sábado», augura.
La idea de Nodo es recorrer los circuitos, ya sea alguno o los tres, eligiendo pocas o muchas galerías, que están todas abiertas hasta mañana de 15 a 20. Una de las maneras es hacerlo guiado por los mapas pero sinceramente no son de mucha ayuda una vez que se camina por la calle de un espacio a otro, probablemente algo a mejorar para la siguiente edición en referencia al link www.nodo.somosmeridiano.com.ar/circuitos.
Por lo menos diez personas se acercaron ayer a lo largo del día a la galería Pabellón 4, en Villa Crespo -otro error en el programa de mano de Nodo- donde inaugura hoy a las 19 lo que sea probablemente una de las mejores exposiciones del circuito, «Relatos in-visibles». El galerista Néstor Zonana abre las puertas y recibe de todos modos a esta cronista y a otras personas que se acercaron al lugar para conocer “Relatos in-visibles”, una exposición de arte electrónico y digital de las artistas Florencia Aquino y Nayla Portas, quienes buscan visibilizar en la cotidianidad la violencia de género.
Son tres obras o «dispositivos tecnopoéticos» que proponen repasar algunos de los innumerables lugares donde la violencia patriarcal se manifiesta: los comentarios sutiles normalizados, la invisibilización de las desigualdades económicas, la banalización mediática con respecto a las estadísticas relacionadas al género y los femicidios y transfemicidios que ocurren diariamente en el país.
En la instalación «La luz del vacío», un panel con una especie de calendario anual va iluminando las estadísticas conocidas de género, que muchas veces son banalizadas en los medios. En Argentina durante el 2021 hubo 256 víctimas letales de violencia de género que involucraron 233 femicidios íntimos de mujeres. A su vez, dichas víctimas tenían 181 niños a cargo. Esta pieza visualiza aquellos datos de forma lumínica. Cada Luz que se enciende es una víctima.
Además, mañana a las 17.30 el público que visite la muestra podrá dejar testimonios personales anónimos referidos a la violencia machista los cuales se van a incorporar a otra de las obras, que luego imprimirá cada testimonio. Será en la galería ubicada en Juan Ramírez de Velasco 556.
Otro de los espacios más concurridos ayer fue Rolf Art, donde un inmenso andamio ubicado en el medio de la sala fue escenario para «Soy una mujer que vuela», una acción performática desarrollada por Ananké Asseff desde una estructura de andamio. Ante una nutrida audiencia, la performer comienza a caminar por esa estructura, luego se baja y se acerca al público. Primero acaricia el brazo de una espectadora, luego se abraza a otra persona. Toma la mano de una mujer y se la lleva a su corazón. Toda la acción hace pensar que son varios los artistas hoy abocados a repensar el cuerpos, los cuerpos, esos que estuvieron vedados de contacto en plena pandemia. La performance o activación se inspira en la actual exposición «Parquedades» de José Alejandro Restrepo y María Teresa Hincapié.
«La activación fue una representación si se quiere de un reencuentro mismo con la gente, con el público asistente, en interrelación con los demás; como un ritual de los que buscan sanar», asegura a Télam la directora de la galería Rolf, Florencia Giordana y añade entusiasmada: «Increíble la cantidad de gente que atendió al circuito de Nodo, sanando la coyuntura, celebrando nuevamente experiencias». La performance se repite hoy a las 19 en la galería de Esmeralda 1353.
Otra de las galerías imperdibles del circuito es Hache, en Loyola 32 (Villa Crespo), donde la galerista Silvina Pirraglia recibe con toda simpatía a los visitantes a la muestra «Verde y negro», de Florencia Böhtlingk, con curaduría de Santiago Villanueva.
Se trata de obras recientes de la artista donde se mezclan paisaje y calle, militancia y naturaleza. Desde los paisajes de Misiones hasta una serie de pinturas de manifestaciones, como las de 8M, 24M, o Cupo trans.
«Tuvimos un primer día de Nodo concurrido y muy alegre en Hache», cuenta la galerista Silvina Pirraglia a Télam y destaca que «arrancó con una visita guiada muy estimulante a cargo de Melisa Boratyn organizada por el Gobierno de la Ciudad, donde charlamos tanto de la muestra de Florencia Böhtlingk como del rol de las galerías dentro del sistema del arte. Hacia el final del día, vendimos una obra a un coleccionista joven». Se proyectarán dos documentales (Colonos de La Flor y María) de la artista, hoy y mañana a las 18, además de la posibilidad de visitar el espacio, en hache.
Nodo, el circuito de galerías de arte distribuido en tres espacios geográficos (Recoleta, Palermo y San Telmo) se realiza del 9 al 11 de junio de 15 a 20 con entrada gratuita.