Fuente: La Nación ~ Nuevos hábitos, nuevas audiencias, nuevos mercados. Esa parece ser la tendencia en la escena internacional del arte, luego de un año que obligó a cancelar ferias y cerrar galerías durante meses por la pandemia, mientras las ventas online demostraban un “extraordinario crecimiento” según Art Basel, las subastas se abrieron a los NFT y las criptomonedas, y los coleccionistas millennials pasaron al primer plano por el monto de sus inversiones. Todo eso tuvo en cuenta la plataforma de e-commerce Diderot.Art, fundada en la Argentina hace cuatro años, al expandir hacia México una propuesta basada en la flexibilidad.
El nuevo sitio diderotart.mx ofrece acceso a más de 250 obras de más de 35 artistas. Al igual que en diderot.art, a toda hora y desde cualquier dispositivo y país es posible comprar en cuotas pinturas, grabados, fotografías, esculturas, dibujos y arte textil, recibir las piezas a domicilio e incluso probar cómo quedan en el espacio durante una semana, con opción de cambio y asesoramiento sin costo. Ambas páginas también incluyen blogs con videos y entrevistas, que permiten conocer cómo piensan y trabajan los artistas.
“Queremos que el público conozca qué está sucediendo en la escena del arte mexicano contemporáneo; por ello, representamos a creadores de todo el país”, dice la curadora Martina Santillán, quien ocupa en el otro extremo del continente el rol de Stephanie Jaugust en la Argentina.
Esta última tuvo a su cargo la curaduría de muestras comoDiderot Digital Exhibition, exposición virtual recorrible en 360° presentada en octubre del año pasado. “En unos meses haremos una exhibición digital que reunirá a ambos mercados”, adelantó a LA NACION Lucrecia Cornejo, cofundadora de Diderot.Art junto con Angie Braun.
“Somos un equipo que busca crear puentes entre artistas y gente que quiere conectar y disfrutar del arte. Porque creemos que en esa conexión hay una experiencia modificadora”, dicen las cuatro desde su la cuenta de Instagram @diderot_art_mexico. Desde allí se promocionan también charlas virtuales y se publican historias que permiten aprender sobre arte de manera simple y didáctica.
“Nuestra plataforma otorga a los artistas locales una visibilidad sin precedentes y, al mismo tiempo, potencia la formación de nuevos compradores y coleccionistas–señala Braun-, promoviendo un círculo virtuoso que complementa y amplía el mercado de compra de arte actual”.