Fuente: La Nación ~ La propuesta de Pedro Reyes quedó en suspenso: piden un artista “indigenista”
La polémica sobre la escultura Tlali continúa. El martes, la jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, tuvo que dar marcha atrás: ya no será el Ejecutivo capitalino quien decida sobre el monumento que sustituirá al de Cristóbal Colón en el Paseo de la Reforma, sino un órgano formado por expertos. El Comité de Monumentos y Obras Artísticas en Espacios Públicos (Comaep) analizará la propuesta del artista Pedro Reyes para avalarla o descartarla.
Hace días, una carta firmada por 350 personas del mundo de la cultura había exigido dejar de lado el proyecto. Encabezada por artistas como Laureana Toledo y Mónica Mayer, la misiva demandaba que se formara un comité de mujeres de comunidades indígenas para elegir a una escultora, también perteneciente a alguno de los pueblos originarios, para sustituirlo.
Acosada por las controversias que rodean a la obra, Sheinbaum ha decidido ponerse al margen. La jefa de gobierno ha querido hacer hincapié en que ya no será ella quien elija el monumento que irá en una de las avenidas principales de la capital, sino el Comaep. “Lo ponemos como lo establece la ley, los reglamentos, a la decisión de este Comité, de qué es lo que va a ir, o cuál es la escultura de la mujer indígena que va a ir en este espacio”, ha dicho en el acto de recepción de las 5000 firmas que impulsaron la salida de Colón de Reforma. En un mensaje confuso, que se ha interpretado de despedida, la jefa de gobierno le ha dado las gracias a Pedro Reyes por tomarse el encargo “como algo fundamental”, y ha anunciado que “es muy probable que parte de su obra esté también exponiéndose en la ciudad”.
Sin embargo, la Secretaría de Cultura ha salido momentos después a aclarar que Tlali no está descartada, sino que los expertos del Comaep van a analizar y decidir entre los proyectos presentados. Hasta el momento, no hay ninguna otra propuesta además de la de Pedro Reyes. No se conoce cuándo se reunirá el comité, aunque Sheinbaum ha hablado de los “próximos días, semanas”.
Una de las principales críticas que tuvo que afrontar el gobierno tras presentar Tlali es la adjudicación del proyecto sin concurso público. Una polémica que busca atajar ahora con la entrada del Comaep en el proceso. Este órgano, perteneciente a la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda está especializado en el arbitraje de monumentos.
A principios de septiembre, Sheinbaum anunció finalmente la retirada de Colón de la avenida, donde llevaba desde 1877, como parte del proceso de “descolonización del Paseo de la Reforma”. La estatua del almirante genovés llevaba casi un año fuera de su glorieta, mientras se restauraba. En su lugar se decidió por un homenaje a las mujeres indígenas. El objetivo era presentar el nuevo monumento, como máximo, a principios de 2022, para que siguiera dentro de la celebración de los 200 años del México independiente, los 500 de resistencia indígena y los 700 desde la fundación de Tenochtitlán.
En una entrevista con El País, Pedro Reyes confirmó que apenas contaba con medio año para tener lista la obra. “Son pocos meses, también por eso se me hizo la invitación. Me preguntaron si yo tenía la capacidad de hacer este tipo de encargos y acabo de hacer uno equivalente para la ciudad de San Antonio, en Texas, donde hicimos una escultura de seis metros de alto”, contó el artista. Ante la pregunta de si debía ser una mujer indígena quien realizara un monumento tan simbólico, Reyes adujo que no creía que fuera una cuestión de género: “En los últimos 15 o 20 años me he sentido muy solo, he estado trabajando la talla en piedra y prácticamente nadie más lo hace. No es tanto una cuestión de género sino de quién ha estado trabajando este tipo de formatos monumentales”.
Sin embargo, las promotoras de la carta enviada a la jefa de gobierno exigen que deben ser mujeres de comunidades indígenas quienes se encarguen del nuevo monumento. Para las artistas, la elección de Reyes “reproduce el silenciamiento e invisibilización de la lucha de las mujeres y de sus pueblos originarios”. Ahora, la última palabra parece que ya no depende de Sheinbaum.