Fuente: Télam ~ El artista ingeniero expone una selección de obras en el Centro Cultural San Martín entre las que se encuentra «Glaciator», premiada en el Festival Ars Electronica 2017 -la más importante cita mundial de las artes electrónicas y digitales que se celebra cada septiembre en la ciudad austríaca de Linz.
«Gaia 3.0» es una muestra de arte interactivo basada en una selección de obras del artista-ingeniero Joaquín Fargas, que puede visitarse en el porteño Cultural San Martín, sobre la idea de que «el futuro de la humanidad dependerá de nuestras acciones de hoy en torno al vínculo tecnología naturaleza», informaron los organizadores.
Gaia, en la mitología griega es la personificación de la Madre Tierra, da título a esta antología que reúne algunas de las instalaciones de arte diseñadas por Fargas y más celebradas a nivel mundial, donde «el público podrá interactuar con obras que cuentan con recursos de accesibilidad para personas con discapacidad visual y motriz», indicaron.
Con entrada gratuita, la muestra podrá recorrerse hasta el 11 de diciembre -los viernes de 19 a 21, los sábados de 18 a 21 y los domingos de 16 a 20- en la sala Sótano Beat del edificio de Sarmiento 1551, CABA.
Piezas como «Robotika, the nannybot» plantean cuestiones como si estamos los seres humanos en condiciones de garantizar la supervivencia de nuestra especie o si estamos dispuestos a delegar en una Inteligencia Artificial nuestro futuro; al tiempo que obras como «Rabdomante», «Glaciator» o «Don Quijote contra el cambio climático» proponen soluciones en relación al calentamiento global y pregunta si esos caminos son utópicos.
En tanto, «El libro absoluto» expone la relación entre la información y el conocimiento y el Proyecto «Biósfera» pone en evidencia la fragilidad del planeta y la necesidad de su cuidado ¿cómo? aislando ecosistemas naturales -que representan a una escala infinitesimal nuestro planeta- en recipientes sellados donde la única interacción con el medio es a través del calor y la luz.
Fargas fue premiado en el Festival Ars Electronica 2017 -la más importante cita mundial de las artes electrónicas y digitales que se celebra cada septiembre en la ciudad austríaca de Linz- justamente por “Glaciator”, una de las obras que se exhiben en el San Martín.
Se trata de un robot que se alimenta de energía solar, creado para compactar y recristalizar la nieve de la Antártida reconvirtiéndola en hielo y permitiendo que se adhiera a la masa del glaciar. Con su lento y poético andar, esta máquina busca generar conciencia sobre las consecuencias del calentamiento global, que en los últimos 50 años ha derretido significativamente la masa de hielo polar.
Ingeniero y artista, Fargas (1950) es responsable de obras ligadas a propuestas posibles o utópicas en relación a la vida, su preservación y la interrelación de los seres. Su obra ha sido expuesta en museos, galerías y bienales en diversas regiones del globo y es titular de la Cátedra de Arte y Tecnología de la Universidad Maimónides, en la cual fundó el Laboratorio de Bioarte, que además dirige.
“Me preocupa el ser humano y sus posibilidades de supervivencia en el futuro. Traduzco eso en mis obras. No me refiero específicamente a temas ambientales, sino a la historia del hombre. Estamos todos en el mismo planeta. Me pregunto qué va a pasar con el medio ambiente de aquí a 200 años, o cómo nos va a modificar la tecnología”, explicó en su momento a Télam.
La pieza que también pasó por Venecia fue distinguida también en la categoría de arte híbrido del Prix Ars Electronica
En tanto, el «Libro absoluto» que podrá verse en el sótano del centro cultural estuvo expuesto en la Biblioteca de Alejandría, Egipto, una de las más importantes del mundo antiguo.
Se trata de la utopía de “un libro que pudiera contener todo el conocimiento en un solo volumen, como una enciclopedia, inspirada en ‘El libro de arena’ y ‘La Biblioteca de Babel’, dos cuentos de Jorge Luis Borges”, contó en aquella entrevista este creador.
¿Es posible un libro contenedor del conocimiento universal? ¿Es Internet la figura que estábamos buscando? Son algunos de los interrogantes que le dieron origen: “El Libro Absoluto nos impulsa a explorar caminos. Sus páginas efímeras no tienen posibilidad de ser mostradas dos veces, solo pueden verse una única vez”, detalla sobre ese objeto, compuesto por dos pirámides unidas por la base que contienen nueve prismas que giran sobre un eje central generando miles de combinaciones.
El espectador debe colocarse frente a la obra y hacerla girar y los resultados producen -en un monitor ubicado enfrente- una página única e irrepetible, gracias a un motor de búsqueda que se alimenta de la información en Internet en forma aleatoria.