Fuente: Perfil ~ En un hecho sin precedentes que seguramente dará que hablar, Bélgica anunció que devolverá a Congo, su ex colonia en África, varios de los objetos culturales que los colonizadores llevaron a su país y que actualmente se exhiben en el Africa Museum, antes denominado Museo real de África Central.
Así lo anunció Thomas Dermine, el secretario de estado belga en política científica y aunque la iniciativa sólo sea un paño frío en la complicada relación que ambos países sostienen desde hace sesenta años, sin duda es una “propuesta copernicana” como lo definió el mismo funcionario del gobierno de Alexander De Croo.
El Africa Museum (ex-Musée Royal d’Afrique centrale) en Tervuren, en las afueras de Bruselas, atesora 125 000 piezas de colección, varios miles de las cuales han sido adquiridas por el pillaje y la violencia; el origen de gran cantidad de otras aún permanece incierto” apunta el periódico Le Monde. “Alrededor del 90% de los bienes culturales belgas que eventualmente podrían ser devueltos se encuentran en Tervuren”, agrega la publicación.
Al sostener “la necesaria restitución de los objetos” y abogar por la realización de estudios e investigaciones concertadas con Kinshasa, la capital congolesa, el ministro Dermine está aceptando que esas adquisiciones fueron ilegítimas durante el reinado de Leopoldo II de Bélgica.
Además de apostar por “una aproximación concertada y un diálogo” con la República Democrática del Congo, varios colaboradores del funcionario adelantaron que la propiedad jurídica de las obras sería transferida del estado belga a las autoridades congolesas, si éstas la reclaman. Lo más llamativo es que, hasta ahora, una demanda similar no llegó al Africa Museum.
Trascendió que el secretario de Estado brindaría apoyo técnico a las autoridades congolesas si Kinshasa reclama los objetos. Los ayudará a crear espacios apropiados de almacenamiento, conservación e incluso valorización de las mismas.
Justo es decir que entre los años 1970 y 1980, cuando Congo se llamaba Zaire bajo la dictadura de Mbutu Sese Seko, unas 200 obras fueron enviadas a ese país. Sin embargo, se supo que varias de ellas se vendían en el mercado clandestino de arte belga, que otras fueron robadas en 1997 cuando cayó el régimen de Mobutu.
Cambio belga
El 30 de junio de 2020, para la celebración de los 60 años de independencia de Congo, el Rey Philippe Léopold Louis Marie expresó públicamente “su más profundo arrepentimiento por el sufrimiento y las humillaciones” infligidas a los africanos durante el período colonial.
En verdad, el gesto no conformó mucho a la nación que había perdido a millones de ciudadanos por la invasión belga, pero era algo. Y sobre todo, era diametralmente opuesto a las palabras que el tío del rey actual pronunciaba en junio de 1960 al referirse a “la obra civilizadora” que había llevado a cabo su antecesor, Leopoldo II, en 1885.
La voluntad del actual ministro sigue la línea del arrepentimiento del Rey Philippe. Nobleza obliga.