Fuente: La Nación – El realismo de una escultura realizada por Mark Jenkins provocó todo tipo de reacciones entre la población del Reino Unido.
La Policía de Londres entró por la fuerza en una galería de arte del centro de la ciudad para socorrer a una persona inconsciente, solo para descubrir segundos después de que se trataba de una instalación de arte.
Cuando los agentes se acercaron a la mujer, que estaba desplomada sobre una mesa en la galería Laz Emporium en el barrio de Soho, vieron que era en realidad una muñeca hecha de cinta de embalaje y relleno.
La escultura realista es una representación de la hermana del galerista Steve Lazarides, Kristina, con la cabeza en un plato de sopa. Él fue quien encargó la obra a su amigo, el artista estadounidense Mark Jenkins, que hace “esculturas callejeras provocativas”.
Antes, Jenkins había hecho una escultura de un cuerpo flotante en un canal de Ámsterdam, lo que también provocó varios llamados de los servicios de emergencia, explicó el dueño de la galería.
Lazarides encargó la escultura para adornar o dar un toque artístico a una mesa de la galería. “No quería tener una mesa de US$24.000 sin algo divertido o angustioso para complementarla. Está ahí para hacer que la gente sonría o se horrorice, para provocar una reacción y captar la atención de la gente. La gente siempre se detiene y mira la obra y es genial porque se quedan y entran en la tienda”, dijo.
Y añadió que la empleada del establecimiento, que estaba en el lugar en el momento de la visita de la Policía, había subido las escaleras para prepararse una taza de té y se sorprendió al encontrar a dos uniformados confundidos y una puerta forzada.
Según explicó un portavoz de la Policía (Met Police, como se conoce a la fuerza en Londres), recibieron un llamado el 25 de noviembre que expresó “preocupación por el bienestar de una persona en un local comercial cerrado” en la calle Lexington.
“Aproximadamente a las 17:57, los agentes ingresaron al domicilio donde descubrieron que la persona era, de hecho, un maniquí. La Met tiene el deber de responder cuando hay preocupación sobre el bienestar (de una persona)”, añadieron por toda explicación.
El mundo del arte se encuentra asombrado por una noticia particular: durante la inspección de rutina de una pintura del artista francés Paul Cézanne conocida como “Naturaleza muerta con pan y huevos”, la jefa del museo de Arte de Cincinnati, Estados Unidos, dio con un secreto guardado en la obra que data de 1865.
Mientras la revisaba, Selena Urry notó algo extraño: pequeñas grietas parecían formarse en zonas muy específicas del lienzo, configurándose así una especie de patrón. Junto a ello, también pudo vislumbrar algunos destellos de blanco que resaltaban entre las quebraduras, lo que le llamó más la atención.
“Lo primero que pensé es que podría haber algo debajo que deberíamos mirar”, contó a CNN. Con intenciones de resolver el misterio, la mujer se puso en contacto con una compañía médica local y solicitó la entrega de una máquina de rayos X portátil para hacer un escaneo y develar de una vez por todas el contenido oculto.
Con ayuda de programas de edición de fotos, encontró finalmente la respuesta que estaba buscando. Al poner la pintura en vertical y unir las manchas descubiertas en un principio, le fue posible dar con la imagen de un hombre.
que vivan los artistas