Fuente: Ámbito ~ Una foto tomada en la localidad de Auvers-sur-Oise, al norte de París, alrededor de 1907, muestra al pintor Vincent Van Gogh en el lugar en el que pintó su último cuadro horas antes de morir, según confirmaron el Museo Van Gogh, en Ámsterdam, y el Instituto Van Gogh, de Francia.
La imagen muestra las poderosas raíces de acacia que llamaron la atención del artista neerlandés y están plasmadas en su último lienzo, titulado «Raíces de árboles», en el que está el camino que lleva a la posada Auberge Ravoux, donde falleció a los 37 años, el 29 de julio de 1890, después de pegarse un tiro.
Según informa el diario El País, representantes de ambas instituciones confirmaron «con absoluta certeza» que la fotografía hallada por un historiador y luego reconocida por un arquitecto muestra el enclave donde pintó ese último cuadro.
Vincent Willem Van Gogh, sobrino biznieto del pintor, y Emilie Gordenker, directora del museo del artista en Ámsterdam, recibieron una reproducción de la fotografía de parte del Instituto Van Gogh. Y su director científico, Wouter van der Veen, aseguró que se trata de un descubrimiento histórico «porque el ángulo de la imagen es muy parecido al escogido por el artista para su obra y varias de las raíces de esta foto fueron cortadas luego y no aparecen ya en la postal presentada el año pasado».
El recorrido para llegar a esta fotografía comienza cuando Thomas Reveau, un arquitecto francés, vio en el blog de un historiador aficionado, Fabrice Dassé, una instantánea que le llamó la atención. Luego Dassé buscó los datos del municipio de Pontoise, cercano a Auvers, y en enero publicó un texto sobre un reportaje fotográfico del río Oise, afluente del Sena.
Se trataba de una serie de negativos en vidrio, que había comprado en Bélgica, y mostraban el viaje en barco realizado por la familia de Edouard van Halteren (1874-1946), presidente del Real Club Náutico de Bruselas, en el verano de 1906 o 1907 y Van Halteren aparece sentado en las raíces, al pie de la Rue Daubigny, el camino que llevaba a la posada de Van Gogh.
«La foto estaba puesta al revés en el blog, pero Thomas Reveau se dio cuenta de que era el mismo paraje de la postal y es conmovedor que unos aficionados hayan acertado así», resaltó Van der Veen.
Según Jean-François Serlinger, dueño del terreno, en este momento «hay una lucha de poder en el seno del Ayuntamiento que impide las visitas» y precisa que «desde que se publicó el hallazgo de la postal, el año pasado hay una tapia que no deja contemplar las raíces de acacia» ya que el Consistorio esgrimió sus derechos sobre el lugar, pero los topógrafos dieron la razón a Serlinger sobre la propiedad.
El dueño del terreno interpuso un recurso por abuso de poder por parte de la alcaldesa, Isabelle Mézieres, y ha abierto unos agujeros en la tapia para que se pueda divisar el lugar.
Relata este itinerario en una página personal de web porque le parece una falta de respeto que «el lugar que fue la última inspiración de Van Gogh y es un lugar poético y de herencia cultural, está tapado» .