Fuente: Grupo La Provincia ~ «Kilómetro 1», una propuesta recién lanzada con el objetivo de presentar intervenciones artísticas en distintos espacios del barrio de San Telmo y un curso virtual que recorrerá la historia del surrealismo en México a partir de artistas como Frida Kahlo, María Izquierdo, Leonora Carrington y Remedios Varo, son algunas de las actividades culturales que tendrán lugar en los próximos días.
El Museo de Arte Moderno se moviliza por el barrio de San Telmo
El Museo de Arte Moderno de Buenos Aires acaba de lanzar «Kilómetro 1», una nueva propuesta de la institución para vincularse con el barrio de San Telmo a través de una serie de intervenciones artísticas. Su objetivo es visibilizar, señalar, poner en valor y potenciar a los artistas, sus talleres y las propuestas creativas, sociales y culturales que se desarrollan en la comunidad.
En el marco de la iniciativa, se realizarán una serie de acciones donde el museo saldrá al barrio y se conectará, a través de sus programas educativos y artísticos, con espacios de San Telmo como El Mercado, la Feria, los templos, el parque, la plaza y sus públicos específicos: niños, jóvenes, adultos, personas en situación de vulnerabilidad económica y social, educadores, personal de salud y sus respectivos deseos y necesidades.
Para el lanzamiento de KM1, la artista Julieta Tarraubella presentará «Búnker», una performance en la que tres personas atraviesan un paisaje urbano distópico con gafas led que reproducen titulares de noticias extraídas de Internet.
En las próximas semanas, el museo presentará intervenciones de los siguientes artistas y colectivos dentro de «Kilómetro 1»: Aurora Castillo, Nina Kunan, Antonella Agesta, Cartón pintado y Francisco Montes.
Curso virtual sobre surrealismo mexicano
Se dictará un curso virtual sobre el surrealismo en México que dará inicio al ciclo sobre arte y cultura de la Fundación Foro del Sur, a cargo del especialista en arte argentino y latinoamericano Miguel Ángel Muñoz, con fecha de inicio prevista para el 24 de junio.
El ciclo de cursos de la organización sin fines de lucro está dedicado a una variedad de temas sobre arte y cultura, y se dicta en modo virtual por reconocidos especialistas.
En cinco encuentros proponen abordar la obra de los grandes artistas mexicanos cercanos al surrealismo como Frida Kahlo, María Izquierdo y Antonio Ruiz «El Corso» entre otros, así como los surrealistas europeos residentes en México como Leonora Carrington, Remedios Varo, Kati Horna y Wolfgang Paalen.
El primero de los temas será «Surrealismo en México» (1930-1940) que indagará en el significado para el arte de la presencia de León Trotsky en México, los viajes de Antonin Artaud y André Breton a aquel país, y la Exposición Internacional del Surrealismo en México (1940).
En los siguientes días se dará cuenta del surrealismo y el problema de la «pintura surrealista», su desarrollo y búsqueda después del manifiesto de 1924, hasta la diáspora por la guerra de 1939; y el problema del surrealismo en México -¿Surrealismo o pintura fantástica? – con nombres como Abraham Ángel, Manuel Rodríguez Lozano, Agustín Lazo, Rufino Tamayo y el entorno de la revista Contemporáneos.
Los cursos en modo virtual van del 24 de junio hasta el 22 de julio. Se puede consultar la página de www.forosur.com.ar
Fuente: Buenos Aires ~ El Museo Fernández Blanco se suma a este evento global, que se realiza en las redes sociales durante una semana. Son 7 días, 7 ideas y 7 hashtags dedicados a la creatividad, para promover una causa internacional, desde el 7 al 13 de junio.
A partir del lunes 7 de junio y durante los siete días de la semana, el MIFB te invita a conectarte con tu celular a la octava edición de #MuseumWeek, para compartir experiencias culturales, logrando una interacción única en el mundo.
El evento nació en Francia en 2014 y está organizado junto con la UNESCO, cada edición promueve una causa internacional con una temática distinta.
Este año el enfoque está puesto en la crisis mundial sin precedentes que provoca la pandemia del coronavirus, que afectó seriamente al sector creativo, obligando a la industria cultural y a los artistas, a manifestarse mediante los medios digitales.
El impacto de la pandemia ha sido muy grande, y la cultura, a través de las redes e internet, se ha transformado en una fuente de consuelo o refugio.
De esta manera los objetivos concretos son: la entrega de la cultura y el arte a los públicos de todo el mundo; estimular el espíritu de creatividad y creación en todos nosotros, especialmente en los jóvenes y, por último, reforzar la imagen de los artistas como actores que participan en el cambio social.
La propuesta es “7 días, 7 ideas, 7 hashtags dedicados a la creatividad”
¿Cómo participar en la #MuseumWeek?
Prepará una publicación según el hashtag del día y compartilo. Todos los contenidos se podrán ver en las redes sociales de cada uno de los museos de la Ciudad.
Te comentamos sobre cada uno de los temas
Lunes 7 de junio: #ÉraseUnaVezMW Érase una vez, el primer día de la #MuseumWeek 2021 comienza con el tema del «comienzo». El comienzo de un libro, el comienzo de una canción, el comienzo de una historia, el comienzo de una era… ¡Explorá este tema y compartí tus descubrimientos!
Martes 8 de junio: #TrasBambalinasMW ¡Ah, entre bastidores! Sin los bastidores, no hay espectáculo. Todo lo que no podés ver si no tenés acceso privilegiado, ¡es un buen tema para este segundo día de la #MuseumWeek!
Miércoles 9 de junio: #LaMiradaDeLaInfanciaMW Es miércoles, ¡día del niño!
Jueves 10 de junio: #EurekaMW Un homenaje a los inventores y a los inventos de todo tipo en este cuarto día de la #MuseumWeek, con este guiño a los que les gusta exclamar «¡Ya lo tengo!».
Viernes 11 de junio: #TitúlaloMW Un viernes dedicado al juego, la interacción y la creatividad entre los museos y su público en línea.
Sábado 12 de junio: #ElArteEstáEnTodasPartesMW El arte, el diseño, la belleza y la poesía están en todas partes para aquellos que estén dispuestos a buscarlos. ¿Quién no ha encontrado formas familiares en las nubes, en un bosque o en la forma de un charco? Hoy investigamos a nuestro alrededor, filmamos, fotografiamos y compartimos.
Domingo 13 de junio: #PalabrasParaElFuturoMW Dejá una nota, una foto, un video, una declaración para las generaciones futuras o para vos mismo.
Fuente: Grupo La Provincia ~ Obras de grandes artistas argentinos como Antonio Berni, Alfredo Guttero, Juan Melé, Gyula Kosice, Xul Solar, Marta Minujín, Guillermo Roux y León Ferrari serán subastadas en línea en el vigésimo remate de la Asociación de Amigos del Museo Sívori, que se llevará a cabo del 15 al 22 de junio.
Con un centenar de obras de artistas plásticos, esta asociación celebra el histórico remate en formato online en esta edición por la emergencia sanitaria, y las obras saldrán a la venta con precios de base que van de 7 mil pesos a 3 millones 400 mil pesos.
Entre los artistas figuran Antonio Berni, Alfredo Guttero, Juan Melé, Gyula Kosice, Xul Solar, Marta Minujín, Guillermo Roux y León Ferrari.
También hay obras de Horacio Zabala, Martín Di Girolamo, Fabiana Barreda, Blas Castagna, Raúl Farco, Claudia Aranovich, Juan Astica, Olga Autunno, Gustavo López Armentía, Andrés Paredes, Eduardo Stupía, Luis Abadi, Bastón Díaz, Ari Brizzi, Zulema Maza, Tulio De Sagastizábal, entre otros reconocidos artistas.
Entre las piezas que salen a remate están «Tiempo tormentoso» (1956) de Berni, año del primer dibujo conocido de Juanito Laguna.
La otra es «Simbiosis – Encuentro», una escultura en bronce que crea espacios y volúmenes virtuales a partir de la torsión de planchas que se insertan unas en otras, de Kosice, maestro del arte cinético y padre de la Ciudad Hidroespacial.
Se remata también una pintura de la etapa informalista de Kazuya Sakai, artista, diseñador, locutor, crítico y editor de origen japonés, nacido en Buenos Aires.
«Círculo encuadrado», período Zen del pintor geométrico Leopoldo Torres Agüero; «Invention 184», de Juan Melé -que fue parte la generación de grandes artistas que se centraron en la investigación y en el cuestionamiento de lo formalmente establecido-; y dibujos de Eduardo Stupía, Gisela Banzer, Ariel de la Vega, Paula Otegui y Mónica Caputo. Lotes que se ofrecen con una base inferior al valor de mercado.
Por otro lado, los artistas donan la mitad del precio final de venta de las obras a beneficio del museo.
Pionera en realizar remates de artes plásticas en nuestro país a beneficio de un museo público, la Asociación de Amigos apoya económicamente al museo en sus proyectos, restauración y conservación del patrimonio.
En estos años el remate se destacó por poner en diálogo obras de artistas consagrados y de las nuevas generaciones.
La apertura es el 15 de junio y el cierre el 22 de junio a las 20.
Fuente: La Nación ~ Mientras las ferias se vuelven híbridas y los viajes se limitan por la pandemia, el medio dirigido por Diego Costa Peuser continúa apostando al potencial de lo virtual para promover el arte latinoamericano en el mundo
Un amplio panorama del creciente alcance que tiene hoy el arte latinoamericano en el mundo: eso es lo que se encuentra al entrar en la renovada plataforma online de Arte al Día, medio dedicado desde hace más de cuatro décadas a la promoción global de la producción artística de la región, que continúa adaptándose a los desafíos impuestos por esta nueva era virtual.
En un momento en que las ferias se vuelven híbridas y los viajes se limitan por la pandemia, el sitio artealdia.com apuesta a la variedad de formatos, contenidos y disciplinas para hacer más visible la esforzada tarea de artistas, galerías, instituciones y curadores latinoamericanos.
Interdisciplinario, interactivo y en constante actualización, este archivo único de reseñas, entrevistas, perfiles y noticias que reflejan el desarrollo de la escena artística regional en el último medio siglo se complementa con material audiovisual y un servicio de alertas de convocatorias a premios, concursos y residencias. En la nueva sección OpenFiles, por ejemplo, los artistas comparten en primera persona el “detrás de escena” de su producción, con detalles y anécdotas sobre sus obras.
“Queremos promover la creación artística, además de difundirla. Por eso trabajamos en una plataforma interactiva que sirva de guía para los artistas, curadores e investigadores que buscan ampliar sus horizontes y desarrollarse profesionalmente en nuevos ambientes”, cuentaDiego Costa Peusermientras comparte por Zoom las novedades de una página que busca informar sin aburrir, al presentar de forma ágil contenidos de calidad. Nacido en Buenos Aires en 1964 y radicado en Estados Unidos desde el comienzo del nuevo milenio, el director de Arte al Día busca ahora llegar a nuevas audiencias con el lenguaje digital y una creciente presencia en redes sociales a través de las cuentas @artealdia.
Claro que, además, cuenta con un capital único: la base de datos de 48.000 personas que fue construyendo a lo largo de más de veinte años de participar en ferias de arte de todo el mundo. La revista en formato papel, que se presentaba con stand propio, llegó a sus 150 ediciones y se vendía en librerías de distintos países, incluida la prestigiosa cadena estadounidense Barnes & Noble. “Eso ayudó mucho a dar visibilidad, pero los costos de distribución y logística eran muy grandes”, explicó Costa Peuser.
Así que, si bien el sitio onlinenació hace 15 años, hace dos se cerró el ciclo del papel de la revista y se ampliaron los contenidos, ahora potenciados. Con acceso gratuito, newsletters quincenales con contenido bilingüe y un sólido equipo internacional de colaboradores que cubre la actualidad en América y Europa, atrae por día entre 1200 y 1800 lectores de todo el planeta.
“No es poco para nuestro nicho”, señala orgulloso Costa Peuser. Y sabe de lo que habla: comenzó ayudando a su padre a vender publicidad para la revista cuando tenía apenas 17 años, y llegó a dirigir ferias de arte y fotografía en Buenos Aires (BAphoto), Lima (PArC), Nueva York, Miami y Londres (Pinta). Ahora planea otra en Basilea, durante la Art Week que coincide con Art Basel, además de Pinta Sud, una serie de activaciones con artistas internacionales en galerías paraguayas.
“Estoy muy comprometido con el arte. Busco nuevas experiencias porque he visto mucho y siento que cuando algo me sorprende, también va a sorprender al otro”, observa, entusiasmado porque finalmente la tan deseada “nueva normalidad” postpandemia se consolida en Estados Unidos gracias a la vacunación masiva. Con la energía ya puesta en la producción de Pinta Miami en diciembre próximo, Costa Peuser asegura que “la gente está con muchas ganas de volver a lo presencial”.
Para comprobarlo, basta ver algunas de las noticias que publica en estos días artealdia.com: el artista brasileñoErnesto Neto transformará desde fin de mes una sala del Museo de Bellas Artes de Houston en una pasarela suspendida con una de las obras tejidas a crochet más grandes que haya hecho hasta el momento; el MoMA exhibe en Nueva York una muestra de fotografía modernista brasileña y el High Line de Manhattan presenta El cerebro musical, exposición colectiva cuyo título se inspira en un cuento del escritor argentino César Aira.
Así, mientras el arte latinoamericano continúe ganando espacios, la plataforma de Arte al Día seguirá creciendo. Sumar una agenda de muestras en galerías e integrar en el mismo sitio la producción de todas las ferias dirigidas por Costa Peuser será el próximo desafío de los programadores, en esta nueva era destinada a cruzar todos los límites.
Fuente: Diario Uno ~ El laboratorio de restauración funcionará en el Museo Municipal de Arte Moderno. Además de la sala de exposiciones funcionará la biblioteca y un archivo de investigación
Desde septiembre, la ciudad no sólo abrirá las puertas del remozado Museo Municipal de Arte Moderno de Mendoza (MMAMM). Lo que poseerán los mendocinos y mendocinas será un espacio dedicado al arte y a la cultura que trasciende la mera exposición de las obras para su contemplación.
El Espacio Cultural Plaza Independencia (ECPI) abarcará distintos espacios, pero sobre todo, se abrirá con nuevos objetivos y metas. Una de las más importantes es la conservación y restauración de la colección propia del museo, que alcanza las 1.800 obras. Para esto, el nuevo MMAMM poseerá un laboratorio de restauración (o restauro), un departamento dedicado a la puesta en valor de las obras para las generaciones futuras.
El equipo del MMAMM poniendo a punto los detalles para la reinauguración
El laboratorio, área que se encuentra bajo la dirección de la restauradora Cristina Sonego, es “el orgullo” del equipo del Espacio Cultural Plaza Independencia, que coordina Daniel Rueda y del que también participa Enrique Testaseca, el director del MMAMM.
Diario UNO dialogó con los hacedores de este proyecto único en el interior del país, que se está equipando con todas las condiciones y bajo reglamentaciones estándares a nivel mundial. Esto permitirá realizar el diagnóstico, clasificación, restauración y conservación de las obras, con los criterios que le abrirán al MMAMM la participación en los circuitos museográficos internacionales.
El abc del laboratorio de arte
Al ingresar al nuevo MMAMM por la remozada sala de arte, que ha ganado más de 200 m2 de espacio para exposiciones, la búsqueda del ingreso a la zona de restauro se realiza bajo totales preconceptos: la idea es que se encontrará a un grupo de gente con delantales completamente cubiertos de manchas de barnices y pinturas y que el olor a trementina invadirá el ambiente, desafiando los barbijos.
Pues no.
El área de restauraciónes lo más parecido a unlaboratorio médico que se pueda percibir en un museo: un ambiente acético, de luz blanca, con aparatos que bien podría manipular un técnico químico o un radiólogo. En la entrada, un grupo de mujeres de guardapolvo blanco, hacen pensar si una no se equivocó de lugar.
El equipo de restauradoras del MMAMM en el laboratorio, que de a poco se está equipando con la tecnología adecuada para poner a punto la colección del museo
En realidad, justamente, se trata de un sitio ligado a la química, y en el que las obras de arte son consideradas “pacientes”, que necesitan un diagnóstico y un tratamiento.
Este proyecto, surgió de la cabeza y voluntad de Cristina Sonego, que se especializó en restauración en Italia, y que piensa en esta disciplina, como una forma de trabajar por las generaciones futuras, a quienes se les legarán las obras, si se realiza este proceso de restauro y conservación. Con ella trabajan la arquitecta Mariela Hug, y la técnica Claudia Parisi. Sin embargo, en el equipo recuerdan a Claudia Aldeco, una cuarta integrante que falleció el año pasado y en la memoria de quien desearon poner en marcha la iniciativa.
Rueda y Sonego cuentan cómo fue el paso de un simple taller a un laboratorio de restauro. Explican que, en primer lugar, se pensó como un concepto, pero para arrancar, fue necesario comprar equipamiento.
“En el interior del país no se conoce un laboratorio de restauro con este equipamiento, es básico para la disciplina de la restauración, pero implica todo un cambio de concepto. Aún falta que lleguen elementos, como la mesa de trabajo, pero nos va a permitir no solamente trabajar con las obras de la colección del museo, sino con obras externas y a futuro poder hacer proyectos de investigación, invitar a profesionales especializados en un área específica, para poder desarrollar esa disciplina” (Cristina Sonego)
Foto: Martin Pravata/ Diario UNO
Esos aparatos son una campana de extracción de gases o de humo, que permite no contaminar el laboratorio de restauro ni el museo, porque en diversos trabajos se utilizan combinaciones de químicos, por esto al mezclar o preparar estas soluciones se evaporan gases que contaminan el ambiente
Además, se adquirió una campana manga, que es la que uno coloca sobre la pintura para poder trabajar de manera apropiada.
A este equipamiento se sumó un armario ignífugo, que es la guarda reglamentaria para los químicos y disolventes, y además, un equipo de climatización para la sala de guarda, con todos los requerimientos necesarios para poder guardar, proteger y conservar la colección.
De esta manera, el taller se transformó en laboratorio de restauro, al adquirir todos estos equipamientos que son los que se utilizan de rigor.
“El taller no tenía las condiciones, pero así y todo había sido pionero en la provincia, una idea iniciada por Cristina y con un equipo de restauro que ella misma formó. Hoy la decisión política no es solo la compra de equipamiento, sino la proyección a largo plazo, porque hay que trabajar sobre las colecciones” (Daniel Rueda, director del Espacio Cultural Plaza independencia)
100 obras restauradas
El primer objetivo que se planteó el equipo de restauración, aún antes de convertirse en laboratorio, fue el de poner a punto 100 obras de la colección del museo para reinaugurar el espacio.
El trabajo comenzó en 2019, y se eligieron obras emblemáticas, de Antonio Berni, Lino Spilimbergo, Leonidas Gambartes, Roberto Azzoni, Carlos Alonso y Benito Quinquela Martín, entre otros.
“La razón de ser de un museo es su colección y desde ahí se disparan los objetivos y misiones: restauro, pedagogía y producción” (Cristina Sonego)
Sonego explicó que, si bien ya se venía trabajando en la conservación, restauración e investigación de la colección, la tarea coyuntural fue abocarse a las cien obras de la exposición inaugural, entre papel, pintura y escultura, que contarán con un guión museográfico.
Foto: Martin Pravata/ Diario UNO
Un trabajo de “hormigas”
Daniel Rueda, director del Espacio Cultural Plaza Independencia y Enrique Testaseca, director del MMAMM, en la sala, próxima a reinaugurar
Para determinar qué obras necesitan una restauración y conservación urgente, y cuáles pueden esperar, lo que se realiza es todo un trabajo previo de registro, catalogación y diagnóstico de las obras, al que los entrevistados se refirieron como un verdadero “trabajo de hormigas”.
Sonego explicó que este trabajo se realiza desde distintas áreas. Es decir que en el momento de registrar una obra, debe por diversos exámenes para determinar el estado en el que se encuentra: bueno, regular o malo (códigos verde, amarillo y rojo, respectivamente)
Esto se realiza en base a criterios internaciones, para que, en un futuro, pueda cumplir con estándares y entrar en red con los otros museos del mundo. Los pasos mencionados permiten saber a qué temperatura y humedad conservar las obras, determinar qué obras tienen mayor urgencia de restauración y conservación y cuáles tienen un “código verde”, y pueden permanecer sin este tratamiento inmediato.
“Las obras que están en regular o mal estado (códigos amarillo y rojo) no se pueden exponer hasta tanto no pasen por el laboratorio de restauro. Como tampoco se pueden intercambiar con otro museo, pero para tener el detalle de toda esta información, hay que realizar este “trabajo de hormiga”, previo, que es lo que está haciendo el equipo del MMAMM antes de la reinauguración” (Enrique Testaseca, director del MMAMM)
Foto: Martin Pravata/ Diario UNO
Foto: Martin Pravata/ Diario UNO
Los por qué de la restauración
La directora del laboratorio de restauro explicó cuáles son las causas por las que es necesario restaurar una obra.
Básicamente, hay dos grandes grupos de causas que pueden poner en peligro a una obra: las exógenas, todo lo externo que rodea una obra, lo que también incluye la seguridad, la manipulación, el vandalismo, la inadecuada climatización y humedad, o contaminantes aéreos y rayos UV. Por otra parte, se encuentran las endógenas: factores, patologías o efectos concomitantes, que pueden tener un bien. Uno de ellos puede ser la antigüedad, aunque no se la considera una patología agresiva.
La nueva entrada del remozado MMAMM, que ha ganado en espacio y condiciones para la restauración y conservación de las obras de su colección
Una de las razones de ser de la restauración es que es una disciplina que permite atender y hacer que muchas obras históricas de siglos puedan existir. Porque el rigor del restaurador es restaurar para las generaciones futuras: uno restaura y conserva para los que vienen”
La idea del laboratorio de restauro es que se sienten las bases, por primera vez en la historia de Mendoza, para poder recibir profesionales que vengan a dar cursos y a formar en un aspecto específico de la restauración.
El área de restauración es nueva, antes se contrataba gente externa para realizar trabajos de restauración específicos, pero no se encargaban de la colección, este trabajo se ha hecho por primera vez. Es un proyecto de conservación que data desde el 2006.
Foto: Martin Pravata/ Diario UNO
Cómo se incrementó la colección del MMAMM
La colección del MMAMM supera las 1.200 obras de arte, más las tres nuevas colecciones que hemos recibido, ya que gestionamos una donación de la Fundación del Interior. Incrementamos con esto el patrimonio de obras de arte del museo casi en un 50%, es decir que actualmente, la colección del MMAMM llega a las 1800 obras-
Esto fue un gran logro de equipo. El museo desde su fundación, hace más de 50 años, no había sido revisado, como proyecto institucional. Hemos hecho este trabajo también.
“Hemos hecho mucho trabajo interno y silencioso, que es lo que no se ve. Sin embargo, estamos trabajando en base a un proyecto, con objetivos y por esto sabemos hacia donde queremos ir. Lo que queremos es devolver el museo a la comunidad” (D. Rueda)
Durante mucho tiempo se quiso donar pero no estaban dadas las condiciones parar recibir esta donación. El museo ahora está en condiciones para recibir esta donación.
Fuente: La Nación ~ Durante toda esta semana habrá charlas, exhibiciones y talleres organizados por los museos porteños y nacionales en homenaje a la Revolución de Mayo; historia y entretenimiento
Los museos porteños y nacionales celebran la Revolución de Mayo durante toda la semana con un programa de actividades virtuales en sus plataformas digitales y las redes sociales. Además de charlas y exhibiciones, el Museo Histórico Nacional ofrece contenido sobre los acontecimientos destacados de la Semana de Mayo dirigido a alumnos de nivel inicial, primario y secundario.
Especial para los más chicos
Una visita animada: Lola recorre los hitos de la Semana de Mayo. En tres videos, que se pueden ver en el canal de Youtube Museos BA y la web Vivamos Cultura, el personaje animado analiza obras y objetos vinculados a la Revolución de Mayo que pertenecen al Museo Histórico de Buenos Aires Cornelio de Saavedra.
Arte hispanoamericano
En el blanco: El poder de la imagen en el arte hispanoamericano, clase de Florencia Fullana, del Museo de Arte Hispanoamericano Isaac Fernández Blanco. Hoy, a las 17, con inscripción previa en el sitio Museos BA.
Té con historias
Edición especial del ciclo organizado por el Museo de la Historia del Traje con Rosana Leonardi y Marcelo Marino como invitados. La charla “Una moda para la patria” se transmitirá en vivo el martes 25 a las 17 por la cuenta @museodeltrajeba.
Mujeres protagonistas del pasado nacional
“Matrias”, un ciclo que propone otra mirada sobre las fechas patrias, invita a repensar el rol de las mujeres en la historia. Son charlas virtuales en formato video didáctico, a cargo de Emilia Zavaleta. En la primera, el martes 25, se hablará de Manuela Pedraza, Juana Azurduy y Mariquita Sánchez de Thompson, entre otras. Se proyectará el corto Las Rosas, dirigido por Isidro Escalante, ambientado en Buenos Aires en 1833.
Exhibición virtual
Se inaugura la exposición virtual del Certamen de croquis y bocetos escultóricos sobre la Semana de Mayo organizado por el Museo de Esculturas Luis Perlotti por el canal de Youtube Museos BA y la web Vivamos Cultura.
Revolución e Independencia
Charla a cargo de Valentina Ayrolo (La Rioja), Oscar Cantero (Misiones) y Sara Mata (Salta), en el marco del ciclo “Provincias y Nación”. El miércoles 26, a las 17.30, transmisión por Facebook Live del Museo Histórico Nacional.
Ser argentino
Empieza el ciclo “Identidad, símbolos e íconos. El artista decodificador de la historia”, organizado por el Museo de Arte Popular José Hernández. El pintor Esteban Díaz Mathé descubrirá la magia del realismo en el retrato y registro de nuestros paisanos en la charla “Ser argentino, una mirada”. El miércoles 26, a las 18, en la web Vivamos Cultura.
Las cartas de Manuelita
En el ciclo Camino al Centenario continúa la serie de conversatorios virtuales por el canal de Youtube Museos BA sobre las colecciones del Museo Histórico de Buenos Aires Cornelio de Saavedra en el año de su centenario. El jueves 27, a las 19, tendrá lugar la charla “Las cartas de Manuelita”, con Lidia González y Daniel Paredes.
El impacto de la Revolución de Mayo en Malvinas
El Museo Malvinas e islas del Atlántico Sur organiza un diálogo entre Marcelo G. Kohen (profesor de Derecho Internacional en el Instituto de Altos Estudios Internacionales y del Desarrollo de Ginebra) y Facundo D. Rodríguez (abogado especialista en derecho internacional y docente de Derecho Internacional) sobre el impacto de la Revolución de Mayo y la Declaración de la Independencia en nuestra soberanía sobre las islas. Viernes 28, a las 18, vía la web del museo.
Fuente: La Nación ~ La digitalización y la posibilidad de recorrer museos con una alta resolución de las imágenes implican el peligro de que las obras se atomicen y pierdan su magia
La distancia entre el observador y la obra de arte no es algo inesencial a la experiencia estética. Nunca lo fue. El cambio es que ahora ya no nos referimos simplemente a las evoluciones de un visitante ante un cuadro en el museo. La tecnología y la virtualidad, cuya multiplicación terminó de gatillar la pandemia con sus cuarentenas, redujo esa distancia casi a la anulación. Hizo incluso más que anularla, la traspasó, de modo que vemos detalles que el ojo por sí solo no vería nunca, y que ni siquiera el artista pudo ver.
Podríamos, como simple ejemplo, mencionar una anécdota personal. Cuando grabábamos el programa Técnica Mixta que se emitía por LN+, había una pantalla que ocupaba entera una de las paredes del estudio. Sobre esa pantalla se veía, gigante, la obra del artista entrevistado. No debe de haber habido uno solo que no quedara asombrado, un asombro que orillaba el pudor. Uno se sentía como si hubiera violado la intimidad, como si en casa ajena se revisaran los cajones de la mesa de luz. Ninguno había visto su propio trabajo con semejante magnificación, lo que constituye una especie de paradoja: la mayor materialidad de la pintura se advierte por vías inmateriales.
Podría ocurrir que terminemos conociendo mejor lo que acordamos en llamar “realidad” por la vía de lo que acordamos llamar “virtualidad”. Los museos que abrieron sus puertas digitalmente (son la mayoría) y Google Arts & Culture nos obligaron a hacer de necesidad virtud. Resulta entonces que, con la posibilidad de magnificar una pintura, terminamos conociéndola con más detalle que si estuviéramos en el museo mismo. Podríamos preguntarnos en qué consiste conocer una obra, aunque más no sea en el simple aspecto del conocimiento que nos depara la observación. ¿Es esta atención casi microscópica que hace del detalle, de una pincelada, una totalidad distinta? ¿O es la cercanía, ese “aquí y ahora” de la obra de arte de la que habló Walter Benjamin? La contemplación estética no trafica con la curiosidad del impertinente. No hay una respuesta, o más probablemente la respuesta comporte una conjunción antes que una disyunción.
Consideremos dos casos. Podemos observar infinidad de reproducciones digitales de Chemin sous bois, en été, de Camille Pissarro, y sin embargo nunca la habremos visto de veras hasta que estemos delante de él en el Musée d’orsay. El artista dejó un efecto en la tela que no existe fuera de ella. Los artistas habría retrocedido ya horrorizados antes os rayos X y la reflectografía infrarroja, que permiten estudiar las versiones preliminares. El pentimento no estaba destinado a ser visto por terceros, del mismo modo que quien se arrepiente lo hace para sí y no comunica el objeto de su arrepentimiento. También aquí debería regir el secreto de confesión. Los microscopios digitales en 3D dan una vuelta de tuerca a este dilema (¿ver o no ver?). Uno de ellos, el Hirox Europe, se aplicó a La joven de la perla, de Vermeer. Se alcanza una resolución de 10,118 megapíxeles, o 10.12 gigapíxeles. La pintura se convierte en un paisaje con accidente geográficos desconocidos. El impasto, esa pincelada “cargada”, perseguía volumen, y parte del interés de ese volumen era que se advirtiera acaso no como un brutal bajorrelieve, que es lo pasaría si le aplicáramos el aumento de una lupa. Otro pintor, Mark Tobey, solía repetir que la misión principal del artista consistía en encontrar lo abstracto en la naturaleza. La tecnología aísla los abstracto en la figuración.
Paisajes del sonido
En diciembre de año pasado, el director Gustavo Dudamel presentó en Españasymphony, que, con anteojos de realidad virtual, combina la imagen real filmada en 360 grados en el escenario con la Mahler Chamber Orchestra y el taller de un lutier con la imagen generada computadora y otros efectos visuales animados. El espectador puede estar en el podio del director o, de manera más extravagante, en el interior de un violín. Son pasatiempos turísticos, y nada hay como el turismo para privar al mundo y a sus cosas de todo enigma y de todo secreto. Ya los primeros planos de las óperas filmadas (recordemos que la ópera está concebida para verse y escucharse a distancia) nos había mostrado la desgraciada lluvia de saliva de los cantantes.
Claro que todo esto es menos nuevo de lo que parece. En su maravilloso libro de conversaciones con Claudio Arrau, Joseph Horowitz registra un diálogo muy significativo. A propósito de los tiempos idos de Teresa Carreño y Ferruccio Busoni, le pregunta al pianista si en esa época las notas falsas perturbaban al público y la crítica tanto como ahora. “No –responde Arrau–. Lo creían propio del genio. Ése era el derecho del genio.” Interlocutor inteligente, Horowitz va más allá: “Las grabaciones son, sin duda, una razón por la que ya no aceptamos las notas falsas tan fácilmente como antes”. “Sí, creo que ésa es probablemente la causa principal –confirma Arrau–. Y, luego, también está ese tonto perfeccionismo que la gente suele apreciar demasiado”.
El breve diálogo apunta al corazón del problema. La misma tecnología que nos permite volver una y otra vez a Wilhelm Kempff o Edwin Fischer, la misma que hizo posible la utópica filosofía del estudio de grabación de Glenn Gould, la que nos permite un descubrimiento permanente en las lecturas del propio Arrau, esa misma tecnología procreó también toda una idea de la perfección fundada en la eficacia. El acierto empezó desde entonces a consistir en no equivocarse antes que en la interpretación en un sentido fuerte.
Pero la mayor intimidad con una música, con cualquiera que sea, consiste en tocarla, aunque sea mal. Tocar el piano es una actividad menos civilizada que escuchar un disco de piano; escuchar un disco de piano es una actividad menos civilizada que asistir a un recital de piano. En este sentido, es un poco más íntima y menos imperativa que la audición en la butaca. No por nada justamente Gould, devoto de la tecnología, pensaba que, frente a un disco, cada uno de nosotros era también un poco compositor: regula intensidades, atenúa colores. Es decir, toma decisiones musicales; modestas, cierto, pero decisiones al fin. Un poco como cuando decidimos dejar en paños menores a una pintura. Estas contemplaciones virtuales nos dejan en un lugar bastante subsidiario: el de compositores de entrecasa y el de mirones.
Fuente: Ámbito ~ Invita a las galerías de arte y artistas representados por ellas y a personas interesadas a sumarse como «aliades» a la conformación diaria de un fondo económico común destinado a artistas visuales en emergencia y con proyección nacional.
El sector cultural, es uno de los más afectados por la pandemia del Covid-19. En este contexto de complejidad e incertidumbre, se presentó Fondo Fluido, una iniciativa económica y solidaria para los artistas visuales en emergencia.
Esta invita a las galerías de arte y artistas representados por ellas y a personas interesadas a sumarse como «aliades» a la conformación diaria de un fondo económico común destinado a artistas visuales en emergencia y con proyección nacional. Las artistas Marina De Caro, Mariela Scafati y Adriana Bustos junto a la gestora cultural Cecilia Garavaglia llevan adelante la iniciativa «Coleccionables de emergencia» desde el año pasado para ayudar a ocho organizaciones sociales y también participan de Fondo Fluido, un nuevo modelo que busca ayudar a artistas visuales de todo el país con un aporte único y solidario desde el propio sistema del mercado de arte.
En el caso de «Coleccionables de emergencia», a partir del trabajo de mediación entre artistas que donan obras de un formato chico y coleccionistas que las adquieren, durante el 2020 se consiguieron más de $1 millón repartidos entre las ocho organizaciones sociales que ayudan cubrir las necesidades básicas alimentarias y de cuidado de sus comunidades.
Garavaglia comentó que se vendieron 153 de las obras y detalló que cada una lleva un certificado de acto de solidaridad y que no pueden revenderse. Por su parte, Scafati señala que «durante el 2020 ninguna de las organizaciones debió suspender las meriendas o la entrega de productos, como sí sucede en este momento», al tiempo que remarcaba que la normalidad está lejos de regresar a la vida cotidiana.
Las organizaciones con las que colaboran son Artistas Solidarios, No Tan Distintas (organización transfeminista de personas en riesgo o en situación de calle), Cocina Móvil Solidaria (Balsa Las Perlas, Río Negro), Varones trans no binaries y familias (La Rioja), Colectivo Yo no fui (colectivo transfeminista), Villeros disidentes (Ciudad Oculta, Ciudad de Buenos Aires), Merendero Juvenil (Barrio 31 Carlos Mujica) y Changuito Solidario del Cera, Escuela de Cerámica Nº 1 (Almagro, Ciudad de Buenos Aires).
Fuente: La Capital ~ Las pinturas se muestran en formato gigantografía en cuatro puntos de la ciudad, y está previsto sumar dos más. La muestra se extenderá mientras dure el proceso de edificación de las nuevas torres. La inédita galería a cielo abierto surge en una época de museos cerrados y actividad cultural reducida.
En tiempos de museos cerrados y actividad cultural reducida, once artistas rosarinos participan de una “Galería de arte en la vereda”, que consiste en la exposición de sus trabajos en formato gigantografía sobre los cercos que protegen obras en construcción y durante el lapso que demande completar las edificaciones. La iniciativa es coordinada por el arquitecto y docente santafesino de la galería de arte AG, Guillermo Aleu.
“Es algo inédito en el país y habiendo investigado antecedentes, por la magnitud y alcance de la propuesta de difusión, es único en el mundo”, se entusiasmó Aleu, y contó que el montaje arrancó a principios de este año. Ya se colocaron cuatro de los seis cercos proyectados, que en total ocuparán 700 metros cuadrados de imágenes artísticas emplazados en distintos puntos de la ciudad. En Santa Fe, en tanto, el proyecto involucra a 17 creadores que vuelcan sus obras en tres lugares representativos y suman otros 600 metros cuadrados.
Las cuatro “galerías” locales a cielo abierto se pueden recorrer en 27 de Febrero y Maipú, Cerrito y Corrientes, Córdoba esquina Cafferata y Maipú al 2000, sobre chapones de la empresa Pilay. Del otro lado conviven en horario diurno decenas de trabajadores que manipulan máquinas y materiales en pos de alzar nuevas torres.
“Mientras dure el proceso constructivo queremos regalar a los vecinos y transeúntes una vista diferente, bella, a la vez que buscamos tender puentes y generar espacios de encuentro entre el arte, las personas y los artistas”, dijeron desde la desarrolladora, con 45 años de trayectoria en el rubro.
Para el coordinador del proyecto, estas exposiciones implican una irrupción en lo urbano y también un compromiso con artistas de la región que desarrollan un lenguaje propio (Javier Carricajo, Fernando Rossia, Jorgelina Toya, Roberta Piedrabuena, Mario Godoy, Esteban Uribe, Pedro Iacomuzzi, Ezequiel Trevisi, Lázaro Diacovich, Enzo Ivkovich y Sebastián Bona en Rosario). Aquí predomina la pintura, aunque hay dos creadores que se expresan en dibujo. Por otra parte, fueron incorporados tres artistas fallecidos a los que se les rinde homenaje en Santa Fe, los destacados Julio César Botta, Domingo Sahda y Raúl Ishikawa.
“La escena urbana luce imágenes de alto contenido simbólico y cultural, lo que desplaza el carácter publicitario que por lo general tienen estos cerramientos perimetrales en las obras edilicias”, apuntó Guillermo Aleu. “Se hacen presentes valores artísticos y educativos, se muestran a la ciudadanía creadores santafesinos en plena vigencia productiva”, analizó. Para los vecinos es una posibilidad de acceder a ellos a través de sus obras, de conocerlos, mientras que los artistas encuentran un circuito no convencional para difundir y promocionar el fruto de su trabajo. Una materialidad que si bien resulta efímera no es sólo virtual sino también tangible para todos, aun en un contexto de pandemia, distanciamiento y restricciones.
Desde la capital provincial, Aleu contó que a la hora de elegir qué exponer “celebramos todo aspecto que pudiera seducir al espectador con el puro oficio del artista representando a la figura humana en plenitud realista o en su versión ingenua como retrato o caricatura; la captación de la luz y el contraste”. También la curaduría valoró “cuando el motivo fuera del reino animal o vegetal, es decir, el paisaje como motivo recurrente de la pintura; el color cuando las expresiones fueran más abstractas en sus vertientes geométricas o expresionistas”.
Los artistas invitados a participar del proyecto, que comenzó a gestarse el año pasado a instancias de la empresa Pilay, elevaron en principio sus propuestas y para el armado de los paneles se alternaron imágenes de lenguaje figurativo -que se consideran más próximas al variado público transeúnte, de modo de captar su mirada- con otras expresiones abstractas “donde ponderamos la fuerza del color, un elemento que siempre define composiciones plásticas e impacta”, indicó Aleu.
El acceso a la galería a cielo abierto es libre para todos aquellos que pasen y posen su mirada desde la calle o la vereda, hasta el término de la construcción que dejará plantadas nuevas torres.
Fuente: La Nación ~ Dos figuras claves del arte argentino se ubicaron esta semana entre los nombres consagrados del mercado internacional en las subastas de Nueva York
Antonio Berni (1905-1981) y Lucio Fontana (1899-1968), dos figuras clave del arte argentino nacidos en Rosario, se ubicaron esta semana entre los nombres consagrados por el mercado internacional del arte en lo que fue el regreso de las grandes subastas tras el dramático paréntesis impuesto por la pandemia global. Las subastas de siglo XX y de arte contemporáneo, de Christie’s y Sotheby’s, que vendieron 481,1 y 80,2 millones de dólares en obras respectivamente los incluyeron en sus lotes junto a Picasso, Rothko, David Hockney, Robert Rauschenberg, Lygia Clark y Andy Warhol, entre otros. El miércoles, Berni consiguió el precio más alto en un remate público para su serie Juanito Laguna cuando se pagaron en Sotheby’s 441 mil dólares por Juanito Dormido, una pintura collage de 1974. En tanto, el jueves por la noche, Christie’s vendió un Concetto Spaziale (1965), de Fontana en 3,87 millones de dólares.
La obra de Berni consiguió además meterse en el top ten de su performance en el mercado internacional en el que ingresó en los años 90 cuando tocó techo con Ramona Espera (1962), comprada por Amalia Fortabat. A partir de entonces, collages y pinturas clásicas del rosarino entraron en un repliegue al punto de que Sotheby’s no había conseguido vender obra suya desde 2013 y para encontrar un precio que perforase la barrera de los 400 mil dólares hay que remontarse veinte años atrás. “Es cierto que en la evolución de los precios de Berni una obra de esta serie y de estas características como es Juanito Dormido pudo tener un precio más alto. Pero es una excelente noticia para todo el mercado argentino y pone a Berni en carrera de nuevo mostrando que el arte sigue siendo una reserva de valor en tiempos de incertidumbre”, observó Nahuel Ortiz Vidal de la casa de subastas Roldán, que en abril año no consiguió comprador paraChiquilín de Bachín, un precioso Juanito de fines de 1964 tasado en 120 mil dólares.
El caso de Fontana es distinto. Si bien nació en Rosario y trabajó en Argentina, la mayor parte de su obra la ejecutó en Italia que terminó siendo su patria adoptiva. Su revolucionaria serie del Concetto Spaziale, en la que comenzó a perforar la tela en buscar de un espacio infinito de la obra que se correspondía con la carrera espacial entre los Estados Unidos y la Unión Soviética, alcanzó relevancia mundial desde Europa y así es como para muchos historiadores es un artista italiano. Sin embargo, él mismo hizo explícito que esas inquietudes le fueron legadas por el paisaje, el vértigo horizontal que describió Drieu la Rochelle, de la pampa gringa donde se crió. Las obras que pertenecen al Concetto Spaziale son numerosas y la que vendió Christie’s en la noche del jueves salió por debajo del estimado en 5 millones de dólares. No significa ningún revés para uno de los diez artistas del siglo XX que más veces perforaron la barrera del millón de dólares en subastas públicas. No hay que ir tan atrás para buscar un top ten del espacialista: en 2018, Christie’s vendió en Londres otro Concetto Spaziale por 21,193 millones de dólares (su récord sigue en 29 millones). La subasta se llamaba “Thinking Italian”, lo que da una idea de que para Europa y la premier league del arte Fontana es italiano (pocas veces, piadosos, le ponen ítalo-argentino) y no entra en el gueto del arte latinoamericano. Es una caso parecido al del cubano Wifredo Lam, quien es considerado un surrealista internacional y que en 2020, en plena pandemia, duplicó su récord público.
Más allá de los precios, la presencia de Berni y Fontana entre los tanques del arte moderno y contemporáneo los confirma como los dos artistas nacidos en Argentina (en Rosario, precisamente) con mayor influencia en la escena y el mercado internacional. En el caso de Fontana es una confirmación y para Berni un regreso a cuarenta años de su muerte en Buenos Aires cuando los Juanitos y Ramonas se amontonaban en su taller de Lezica y Rawson, Almagro, sin ninguna expectativa de mercado. Después de Almendra habrá que decir ahora: ‘Se ríe Juanito dormido, quizás se sienta gorrión esta vez…”